El Viajero
9 fotos

10 casas rurales para disfrutar de una buena chimenea

Cálidos alojamientos para finalizar una jornada de campo perfecta

Elena Sevillano
Whatsapp
Facebook
Twitter
Linkedin
En la Casa Rural Azpikoetxea (de alquiler íntegro, para 10-12 personas) hay una mezcla armoniosa de tradición y toques contemporáneos. Su aspecto exterior, de principios del siglo XVIII, la piedra, las vigas de madera y algunos utensilios domésticos a modo de decoración son buenos ejemplos de lo primero. De lo segundo dan fe los baños y la chimenea, encastrada en un pequeño tabique en mitad del salón (en la foto), visible desde sus dos caras y con el tiro visto. El alojamiento se encuentra estratégicamente situado en Etxarri Larraun (Navarra), entre Pamplona y San Sebastián. casaruraletxarri.com
Una chimenea tipo 'cassette', encastrada en la pared y flanqueada por un mueble acristalado con libros, es uno de los rincones más acogedores de los aproximadamente 300 metros cuadrados de zonas comunes que ofrece el Palacio de Prelo, en Boal (Asturias). Entre ellos, varios salones, una biblioteca de libros de ensayo y de ficción, un horno de piedra del siglo XVIII, un billar español y un bonito jardín, con acceso directo desde el comedor. Todo a 400 metros de altura con vistas privilegiadas al valle del río Navia y a las sierras de la Bobia y de Carondio. palaciodeprelo.com
Los huéspedes de Mas de la Serra, en la comarca del Matarraña (Teruel), conocen mucho de la familia del propietario cuando se alojan en esta antigua masía: desde sus cuadros hasta su colección de whiskys pasando por sus enseres antiguos, que se combinan con muebles modernos y las comodidades de un hotel 'boutique'. Alumbran esta mezcolanza dos chimeneas: una rústica, abierta, en la sala de estar de la planta baja, y una estufa de forja negra en la planta superior, que incluye bonitas vistas al parque natural dels Ports. masdelaserra.com
El dormitorio con cama gigante y una chimenea de leña de ambientación antigua es una de las señas de identidad de esta casa de pueblo con más de 400 años de antigüedad y 75 metros cuadrados repartidos en una sola planta. Tonos blancos, ambiente rústico, lámparas de araña y puertas de panel, con un comedor de amplio ventanal desde el que disfrutar de las montañas y de los campos de naranjos. Está localizada en Fornalutx, pueblo mallorquín de la sierra de Tramuntana, en el valle de Sóller. homeaway.es
La chimenea de La Casona del Guijar irradia calor desde un rincón discreto del salón, rodeada de piedra y sofás de flores. Este alojamiento rural de alquiler íntegro, con capacidad para 23 personas e inaugurado en 2017 en El Guijar, provincia de Segovia, es el resultado de la remodelación de tres antiguas casas de labranza. Ofrece tres patios, uno de ellos con piscina, porche para barbacoa y un entorno natural cercano al valle del Pirón y las Hoces del Duratón. Una empresa de gastronomía típica segoviana se encargar de la comida si a los huéspedes no les apetece cocinar. lacasonadelguijar.com
La chimenea de forja negra con patas contrasta con el blanco predominante de El Vergel de Chilla, complejo rural formado por dos casas rurales (de nombre Abejas) decoradas en estilo provenzal francés y con capacidad para cuatro personas cada una. Se encuentran en una finca privada de dos hectáreas de extensión en la ladera de Chilla, en la vertiente sur del pico Almanzor, con el parque natural de la Sierra de Gredos lindando a sus espaldas, muy cerca del pueblo de Candeleda (Ávila). elvergeldechilla.com
Entre las ofertas y servicios que hacen del Villa Magalean Hotel & Spa, al pie del casco antiguo de Hondarribia (Guipúzcoa), un hotel 'boutique' figura el salón de lectura en tonos blancos, amplios ventanales y suelo de parqué, con su elegante chimenea encastrada en mármol y con el tiro a la vista. Nacido de la rehabilitación y ampliación de una villa de estilo neo-vasco de los años cincuenta, el alojamiento dispone de prensa internacional diaria y de una biblioteca con libros, juegos y DVD. villamagalean.com
El pack Romántico del hotel Barosse, en la localidad de Barós, en Jaca (Huesca), incluye una cena para dos con música y luz de velas junto a la bonita chimenea del salón-comedor, tipo 'cassette', sin encastrar, y con el tiro a la vista. Es uno de los platos fuertes de este alojamiento solo para adultos –sus propietarios definen su oferta como “hotelería de autor”– desde el que disfrutar del románico y los paisajes del Pirineo aragonés, así como de actividades de turismo activo. barosse.com
La chimenea abierta destaca como epicentro cálido del gran salón de El Racó de Madremanya, masía reconvertida en pequeño hotel de 14 habitaciones en Madremanya, pueblo medieval construido en piedra en la comarca del Gironés, en el límite con el Ampurdán (Girona). La piedra rodea precisamente esta chimenea, tanto en las paredes como en el techo abovedado, creando un ambiente perfecto para una tarde de lectura. La masía también cuenta con chimeneas en algunas de sus habitaciones, piscina climatizada y ofrece servicio de masajes y tratamientos faciales y corporales. Para público adulto. elracodemadremanya.com