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Islas Salomón, cuando el surf se queda en segundo plano

El fotógrafo Juan Fernández se deja llevar por su pasión por el surf para buscar paraísos recónditos donde disfrutar de las olas

La vegetación es tan densa que la comunicación entre sus pobladores se realiza normalmente a bordo de canoas de madera de ébano..Juan Fernández
Arrecife, arena y cocoteros, no existe nada más en la mayoría de estos pequeños atolones.Juan Fernández
La aldea de Kagata - al noroeste de la isla de Santa Isabel - fue levantada sobre el mismo manglar por su patriarca, Don Lekeito, donde vive con su familia, compuesta entre hombres, mujeres, niños y por 12 miembros.Juan Fernández
Kia es con 300 habitantes la villa más poblada del noroeste de Santa Isabel.Juan Fernández
Cada sábado la familia Lekeito, devotos adventistas del Séptimo Día, acude a la aldea de Ritamala para asistir a la iglesia.Juan Fernández
La mayor parte de las casas en Kia se construyen sobre el agua para facilitar las deposiciones de sus habitantes.Juan Fernández
Los cocos forman una parte esencial en la gastronomía local.Juan Fernández
Iglesia protestante en la villa de Kia.Juan Fernández
Niños tímidos y sonrientes en la villa de Kia.Juan Fernández
El mar sin viento pero con olas es la combinación perfecta para todo surfista, en las Islas Salomón se produce a menudo ofreciendo olas de gran calidad sobre los arrecifes.Juan Fernández
El pelo rubio y la pigmentación oscura de la piel es un rasgo único en el mundo propio de los habitantes de las islas Salomón. En la imagen Dekta, de 21 años y padre de dos hijos.Juan Fernández
Desde lo alto de “Dog Rock” los antiguos habitantes de Ritamala vigilaban la llegada de otras tribus cercanas.Juan Fernández
Niños jugando con tablas de surf rotas en la aldea de Colpakisa.
Un indígena llamado Kale, navega desde su aldea hasta los arrecifes exteriores - a unos 7 kilómetros mar adentro - para practicar surf.Juan Fernández
: La hoja de palma es el elemento principal junto con la madera de ébano o de manglar. Embarcadero de la aldea Kagata, isla de Santa Isabel.Juan Fernández