Confrontación democrática
Estos días, los medios han recogido las declaraciones de Quim Torra ante el primer paso dado por el Gobierno de España para recurrir su Plan Estratégico de Acción Exterior (tema de las embajadas catalanas): “No hay ningún otro camino que la confrontación democrática”. Si esa “confrontación democrática” se realiza de acuerdo con las leyes vigentes, bienvenida sea. Pero me temo que el actual Govern, de nuevo, realmente, quiera aplicar la “ley del embudo”, presentar y promover ante los tribunales superiores aquellos recursos que esperan les sean favorables y, al mismo tiempo, no obedecer, por eje...
Estos días, los medios han recogido las declaraciones de Quim Torra ante el primer paso dado por el Gobierno de España para recurrir su Plan Estratégico de Acción Exterior (tema de las embajadas catalanas): “No hay ningún otro camino que la confrontación democrática”. Si esa “confrontación democrática” se realiza de acuerdo con las leyes vigentes, bienvenida sea. Pero me temo que el actual Govern, de nuevo, realmente, quiera aplicar la “ley del embudo”, presentar y promover ante los tribunales superiores aquellos recursos que esperan les sean favorables y, al mismo tiempo, no obedecer, por ejemplo, los requerimientos de nuestro Tribunal Supremo para que no llevasen a cabo el referéndum ilegal del 1-O.
Juan Lois Mosquera
O Carballiño (Ourense)