Políticas para un desarrollo sostenible
En Bélgica, donde vivo, mi compañía suministradora de electricidad se ofrece a instalar en el tejado de mi casa, y a bajo coste, paneles solares para producción de electricidad. Al mismo tiempo, otra compañía se ofrece a instalar los paneles gratuitamente si cedo durante 10 años los derechos que consiga cuando vierta en la red eléctrica lo que exceda de mis propias necesidades. En España, y gracias al cambio de legislación que ha decidido el reciente Gobierno de Sánchez, ofertas similares empezarán a ser habituales en breve.
Valga este ejemplo sobre las energías renovables para ilustra...
En Bélgica, donde vivo, mi compañía suministradora de electricidad se ofrece a instalar en el tejado de mi casa, y a bajo coste, paneles solares para producción de electricidad. Al mismo tiempo, otra compañía se ofrece a instalar los paneles gratuitamente si cedo durante 10 años los derechos que consiga cuando vierta en la red eléctrica lo que exceda de mis propias necesidades. En España, y gracias al cambio de legislación que ha decidido el reciente Gobierno de Sánchez, ofertas similares empezarán a ser habituales en breve.
Valga este ejemplo sobre las energías renovables para ilustrar cómo unos políticos hacen políticas en contra de la ciudadanía y del desarrollo sostenible, mientras que otros —con los peros que se quieran— tratan de mejorar la vida de la ciudadanía. No deberíamos perder de vista lo importante.
Javier López Ariza. Bruselas (Bélgica)