Una tigresa devorahombres muere en una valla electrificada en India

La Justicia del país había ordenado dos días antes su caza tras cobrarse su cuarta víctima mortal

Un tigre del parque nacional de Corbett, en la India.El País

La tigresa Kara (negra en hindi) llevaba atemorizando a los habitantes del Estado de Maharashtra, en el corazón de India, desde el pasado mes de julio. El animal se cobró su cuarta víctima mortal el pasado viernes, tras lo que un juzgado de dicho estado ordenó acabar con el felino. Pero al final, las infraestructuras humanas se han adelantado a los cazadores: la tigresa murió este domingo electrocutada en una valla, según ha anunciado un responsable local.

"Murió electrocutada el sábado a las 2.30 [23.00 hora española], hemos recuperado su cadáver", ha afirmado Rishikesh Ranjan...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
Más información

La tigresa Kara (negra en hindi) llevaba atemorizando a los habitantes del Estado de Maharashtra, en el corazón de India, desde el pasado mes de julio. El animal se cobró su cuarta víctima mortal el pasado viernes, tras lo que un juzgado de dicho estado ordenó acabar con el felino. Pero al final, las infraestructuras humanas se han adelantado a los cazadores: la tigresa murió este domingo electrocutada en una valla, según ha anunciado un responsable local.

"Murió electrocutada el sábado a las 2.30 [23.00 hora española], hemos recuperado su cadáver", ha afirmado Rishikesh Ranjan, responsable de la Pench Tiger Reserve. "La valla había sido levantada por los aldeanos para protegerse de los animales salvajes, principalmente de los jabalíes", ha añadido.

Kara, una tigresa de Bengala, fue capturada en julio tras haber matado a dos aldeanos y herido a otros cuatro en la localidad de Brahmapuri. En aquella ocasión se le colocó un collar con emisor de radio antes de dejarla en libertad en la reserva de Bor, pero el felino volvió a atacar a humanos y mató a otras dos personas.

En octubre del año pasado, una tigresa fue abatida de un disparo en el norte de India tras una cacería de 44 días en la que se movilizaron drones, helicópteros, elefantes y perros de caza. El animal, de tres años, había sido acusado de matar a tres aldeanos y de herir a otros tres desde septiembre. Los habitantes de la zona celebraron su muerte sacando en procesión el cadáver del animal durante casi tres horas.

En India vive la mitad de la población mundial de tigres, 2.226 ejemplares según el último balance oficial, que data de 2014.

Más información

Archivado En