El equipo femenino de gamers Pandacute, de HongKong, es un ejemplo polémico de cómo las mujeres se incorporan al mundo de los videojuegos
Hong Kong -
Un poster de mercadotecnia de la capitana de PandaCute, Deer, en la oficina que ocupa el grupo.Zigor AldamaDos de las integrantes de PandaCute comentan una jugada en el local en el que entrenan de diez de la mañana a ocho de la noche.Zigor AldamaLa capitana Deer, a la izquierda, y Momo, posan frente a uno de los ordenadores en los que entrena PandaCute.Zigor Aldama
Las integrantes de PandaCute, con Rispy en primer plano, durante un entrenamiento en su local de Hong Kong.Zigor AldamaLas PandaCute esperan con su entrenador, Kane Li, en una sala adyacente a su turno para participar en el Hong Kong Esports Festival.Zigor AldamaTres integrantes de PandaCute en el momento en el que acceden al escenario del Hong Kong Esports Festival.Zigor Aldama
Seguidores de PandaCute en el Hong Kong Esports Festival. La gran mayoría son hombres que se ven atraídos por sus habilidades y su estética 'kawaii'.Zigor AldamaLa capitana Deer prepara el ordenador para la competición en el Esports Festival, en el que PandaCute ha sido ganadora.Zigor AldamaLas PandaCute durante un momento de la partida con la que resultaron victoriosas en el Hong Kong Esports Festival.Zigor Aldama Una aficionada a los videojuegos prueba uno en el China Joy de este verano en Shanghái.Zigor Aldama A pesar de que el gobierno chino ha regulado la vestimenta de las azafatas que participan en el China Joy, la mujer sigue siendo un reclamo sexual para los visitantes masculinos que acuden al evento.Zigor AldamaUna azafata en el China Joy de Shanghái. Zigor AldamaZhou Lin prueba un videojuego de coches en el China Joy.Zigor AldamaEl detalle de la ropa interior de la escultura que preside China Joy ha resultado polémico en la última edición.Zigor Aldama
Si quieres seguir toda la actualidad sin límites, únete a EL PAÍS por 1€ el primer mes