Cartas al director

Reino Unido y el populismo

Para Theresa May, el drama no es solo haber perdido la mayoría absoluta en las últimas elecciones y el apoyo de gran parte de su partido, sino encontrarse interpretando un papel que hasta hace poco no era el suyo, el de defensora radical de la ruptura con Europa. Harían bien, igualmente, los laboristas en no atribuirse votos que, en realidad, eran un castigo a May. Coquetear con el populismo es una ruleta rusa y lo que a los grandes partidos les conviene es devolver el debate político a los cauces de la moderación. Eso no va a impedir que algunas siglas queden obsoletas, ya sea el socialismo f...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Para Theresa May, el drama no es solo haber perdido la mayoría absoluta en las últimas elecciones y el apoyo de gran parte de su partido, sino encontrarse interpretando un papel que hasta hace poco no era el suyo, el de defensora radical de la ruptura con Europa. Harían bien, igualmente, los laboristas en no atribuirse votos que, en realidad, eran un castigo a May. Coquetear con el populismo es una ruleta rusa y lo que a los grandes partidos les conviene es devolver el debate político a los cauces de la moderación. Eso no va a impedir que algunas siglas queden obsoletas, ya sea el socialismo francés o, antes, la democracia cristiana en Italia, pero facilitará que el reemplazo venga del centro y no de los extremos.— J. D. Mez Madrid. Olot (Girona).

 

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En