madres. padres e hijos

Noche de pizza y película con los niños

Si no puedes con el enemigo, únete a él. Ya que lo de salir al cine y a cenar se nos ha hecho bastante difícil, podemos traerlo a casa

Si no puedes con el enemigo, únete a él. Ya que lo de salir al cine y a cenar se nos ha hecho bastante difícil desde que tenemos tantos niños, hemos traído a casa el cine y la cena. Bueno, cenar lo hacemos todos los días, no os vayáis a creer; me refiero a algo especial. Así que desde hace un par de meses, y aprovechando que los dos mayores, David y Natalia, ya disfrutan de películas largas, los sábados por la noche tenemos sesión familiar de cine y pizza casera. Es un pequeño ritual que hemos instaurado: ayudan a Eduardo a poner los ingredientes de la pizza, y en vez de comérsela en la mesa, ...

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Si no puedes con el enemigo, únete a él. Ya que lo de salir al cine y a cenar se nos ha hecho bastante difícil desde que tenemos tantos niños, hemos traído a casa el cine y la cena. Bueno, cenar lo hacemos todos los días, no os vayáis a creer; me refiero a algo especial. Así que desde hace un par de meses, y aprovechando que los dos mayores, David y Natalia, ya disfrutan de películas largas, los sábados por la noche tenemos sesión familiar de cine y pizza casera. Es un pequeño ritual que hemos instaurado: ayudan a Eduardo a poner los ingredientes de la pizza, y en vez de comérsela en la mesa, se la llevan al sofá, donde también comparten una lata de coca-cola mientras ven la peli de turno.

Y aquí, en la elección de la película, es cuando se viven los momentos de mayor tensión, por delante de la impaciencia por poner jamón o queso rayado sobre la masa de la pizza o el conseguir que se laven los dientes y se acuesten al terminar. Lo difícil es encontrar una que, a priori, apetezca a los tres. Una vez puesta, David, de seis años y medio, y Natalia, de cinco, se suelen quedar enganchados. Y Elisa, que aún no tiene tres, la ve un rato, y luego se pasea, o juega a otra cosa. Pero digamos que el momento de votación democrática no suele ser muy pacífico, y al final se suele imponer la dictadura.

Con la de sábados que nos quedan por delante, y el repertorio Disney/Pixar y Star Wars bastante quemados, no viene mal tener más ideas. Aquí os cuento algunas. Y serán muy bienvenidas las sugerencias que nos dejéis en los comentarios.

El compañero de EL PAÍS en Cádiz, Pedro Espinosa, me ha hecho llegar una encuesta realizada entre 40 periodistas con niños de la provincia, publicada en la web Con los peques. No es científico, pero es una muestra de algunas buenas películas para niños:

20 votos: Toy Story

13 votos: El Rey León

12 votos: Mary Poppins

11 votos: ET, Up.

10 votos: Los Goonies

6 votos: El libro de la selva

5 votos: Shrek, Sonrisas y lágrimas.

4 Votos: Bambi, Buscando a Nemo, Charlie y la fábrica de chocolate, Enredados, Frozen, La Sirenita.

3 votos: 101 Dálmatas, Chitty Chitty Bang Bang, El mago de Oz, Monstruos, Peter Pan, Pinocho.

2 votos: Alicia en el país de la maravillas, La bella y la bestia, Blancanieves, La bruja novata, Cars, Fantasía, La historia interminable, Ice age, Los increíbles, Indiana Jones, Regreso al futuro, Tiana y el sapo, Wall-E,

1 voto: 20.000 leguas de viaje submarino, Aladdin, Los aristogatos, Las aventuras de Tom Sawyer, Balto, Beethoven, Bichos, Capitanes intrépidos, La cenicienta, Dumbo, En busca del valle encantado, Exploradores, Harry Potter, Hook, Hormigaz, Gremlins, Gru, El jardín secreto, Jumanji, Madagascar, Matilda, Megamind, Mi amigo el fantasma, Mulan, My girl, Parque jurásico, Pedro y el dragón Elliot, Pesadilla antes de Navidad, El retorno de las brujas, Robin Hood, La princesa prometida, Ratatouille, Stuart Little, Superman, Tarzán, el rey de la jungla, Teleñecos en cuento de Navidad, Tintín y el templo del sol, Todd y Toby, Willow.

A estos títulos añadiría cinco que han gustado bastante en casa: Los Croods (las aventuras de una familia de cavernícolas), Arthur Christmas (la divertida intrahistoria de Papá Noel, su familia y cómo reparten los regalos) , El gato con botas (spin-off del personaje canalla y pendenciero de Shrek), Río (la aventura de los dos últimos guacamayos azules en Brasil) y Kika superbruja (adaptación del personaje de los libros de Knister, publicados en España por Bruño).

Dentro de las películas que se han mencionado en la encuesta, hay algunas que no son puramente para niños, como Regreso al futuro, Parque jurásico, Gremlins o Willow. Y es que también pueden disfrutar de pelis de mayores, quizás no de arte y ensayo o de terror. Pero nos pueden sorprender. Como ya conté antes, David está en pleno enganche a toda la saga de Star Wars, y Natalia, sin estar tan entusiasmada, las ve también. Incluso Elisa pregunta con su lengua de trapo "mamá, ¿eze e Daveide?" (traducción: ¿ese es Darth Vader?).

"De lo que se trata es de ampliar las posibilidades. De que nos demos cuenta de que tener hijos no quiere decir que tengamos que vivir rodeados de globos y payasos. En casa hay niños, pero también hay adultos. Cada uno con sus necesidades", explican Noelia Terrer y Carlos Rubio en su libro 100 pelis de adultos para ver con niños (Editorial Litera). Esta pareja de publicistas valencianos da algunos consejos previos antes de una sesión cinéfila:

  • La edad es menos importante de lo que creemos. Depende del niño, de sus gustos, de si tiene hermanos mayores... Elisa es el vivo ejemplo de esto. A su edad, David apenas salía de Dora la Exploradora y Caillou.
  • Respecto a la violencia y el miedo, no depende de la edad, sino de los gustos. Hay personas a las que les gusta pasar miedo, y otras, incluso adultas, a las que no. Hay que conocer a nuestros hijos y saber qué les puede gustar. Los autores opinan que hay que analizar qué tipo de violencia aparece y cómo la va a digerir: "Sería una lástima perderse Con faldas y a lo loco porque empieza con un tiroteo". Como explican, los dibujos animados tampoco están libres de violenca: "padres que son asesinados al empezar la historia, madres que secuestran a sus propias hijas"...
  • Ver la película antes sin ellos para asegurarnos de que son adecuadas y de que no les va a aburrir ("si fallamos con una no pasa nada, pero si fallamos varias veces seguidas pierden la confianza en nuestro criterio y luego no querrán sentarse con nosotros a ver una película").
  • Verla con ellos, para acompañar los momentos de tensión y resolver sus dudas.
  • No explicar todo si no preguntan.
  • Si algo les impresiona, que no se queden a la mitad, sino que vean cómo se resuelve.

El libro, o más bien librito (mide 12x15 centímetros, el tamaño de una foto normal), incluye la ficha de cada película, la sipnosis y una pequeña descripción de lo que les puede gustar, o de cómo reaccionó un niño en concreto al verla. No son las mejores, como dicen los autores, sino las que han funcionado en distintas familias a las que han preguntado o en su propia casa. Incluye títulos tan variados como 3 solteros y un biberón, Cinema Paradiso, Alien, Superman, Un pez llamado Wanda o Descalzos por el parque. Es decir, algunas de aventuras o familiares, pero otras que quizás no se nos hubiera ocurrido que pudieran gustar a nuestros hijos. Pero como Terrer y Rubio recuerdan, cuando nosotros éramos pequeños, ¿no nos encantaba ver pelis de los hermanos Marx, o de piratas? Mi hermano y yo nos tragamos todas las de Bud Spencer y Terence Hill, las del gendarme de Louis de Funès, las de 007 y las de Hithcock. Puede que no a los cinco años, pero sí a los nueve o diez. Es cosa de ir probando y de no autolimitarnos al sota caballo y rey de los dibujos para niños.

Y vosotros ¿qué películas véis en casa con vuestros hijos? ¿Cómo las elegís?

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