18 fotos

Las secuelas de Fukushima

Japón sigue luchando contra los residuos radiactivos generados por el accidente nuclear causado por el seísmo de 2011

El Gobierno nipón ha anunciado que ha comprado parcelas cercanas a la planta para almacenar de forma temporal unos 30 millones de toneladas de residuos radiactivos generados desde entonces. En la imagen, Norio Kimura muestra fotografías de su hija, Yuna, fallecida por el tsunami.Toru Hanai (REUTERS)
El objetivo es enterrar la tierra extraída durante las labores de descontaminación en una zona de 16 kilómetros cuadrados en los pueblos de Okuma y Futaba, aunque el Ejecutivo aún no ha podido adquirir todos los terrenos porque muchos de sus más de 2.000 propietarios recelan de que el depósito sea temporal y se niegan a vender. En la imagen, tierra contaminada por la radiación, hojas y otros residuos recogidos durante los trabajos de descontaminación se almacenan en grandes bolsas de plástico negras en una playa cercana a Fukushima.Toru Hanai (REUTERS)
Las emisiones y vertidos radiactivos mantienen desplazadas a más de 68.000 personas que vivían junto a la planta. En la imagen, un trabajador recoge tierra, hojas y otros materiales contaminados por la radiación en un bosque de bambú del municipio de Tomioka.Toru Hanai (REUTERS)
Dos trabajadores manipulan bolsas con material contaminado, protegidos con trajes especiales.Toru Hanai (REUTERS)
Varias grúas remueven terrenos contaminados en un área desvatada por el terremoto y el tsunami en el pueblo de Namie, cerca de Fukushima.Toru Hanai (REUTERS)
Norio Kimura reza frente a un monumento que construyó para recordar a su familia fallecida por el terremoto.Toru Hanai (REUTERS)
Trabajos de descontaminación en un bosque de Tomioka.Toru Hanai (REUTERS)
Un trabajador descontamina un muro de una residencia privada en Tomioka con una máquina de vapor.Toru Hanai (REUTERS)
Vista de una playa de Tomioka donde se almacenan decenas de bolsas con residuos radiactivos.Toru Hanai (REUTERS)
Eiichi Shincho, de 67 años, camina frente a un templo dañado por el terremoto cerca de su casa, en la zona de exclusión de Okuma.Toru Hanai (REUTERS)
Un monumento con ofrendas recuerda a las víctimas de 2011 frente a una playa donde se concentran bolsas de plástico con residuos contaminados.Toru Hanai (REUTERS)
Cuatro años después del terremoto, la escuela de Kumamachi, situada en la zona de exclusión de Okuma, sigue tal como quedó cuando fue abandonada durante el terremoto.Toru Hanai (REUTERS)
El jersey escolar de Yuna Kimura, la hija fallecida de Norio Kimura, reposa en un templo dentro de la zona de exclusión de Okuma.Toru Hanai (REUTERS)
El alcalde de Okuma, Toshitsuna Watanabe, en una reunión con ciudadanos evacuados del pueblo que siguen sin poder volver a sus casas.Toru Hanai (REUTERS)
Tomoko Hoshino, de 78 años, una de las personas que aún no han podido regresar a sus hogares en Okuma, llora durante su reunión con otros desplazados y el alcalde.Toru Hanai (REUTERS)
Tomoko Hoshino, de 78 años, y su esposa, Akira, de 79, conversan en la casa temporal en la que viven tras ser evacuados de Okuma.Toru Hanai (REUTERS)
Complejo de viviendas prefabricadas instaladas tras la catástrofe para acoger a los desplazados de Okuma.Toru Hanai (REUTERS)