Cartas al director

Móviles omnipresentes

Con las nuevas incorporaciones tecnológicas de la telefonía móvil a nuestras vidas hemos llegado a un punto en que los excesos y molestias casi superan los beneficios.

Para empezar es un agravio tener que escuchar las conversaciones ajenas en lugares públicos a grito pelado. Sin duda estamos ante un problema de falta de educación, de afán de protagonismo y de pobreza intelectual. Además, me decepciona y entristece lo que le está ocurriendo a una inmensa mayoría de gente que está enganchada a los móviles en cualquier situación: reuniones de ocio, comidas y cenas, en bares, en transportes...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Con las nuevas incorporaciones tecnológicas de la telefonía móvil a nuestras vidas hemos llegado a un punto en que los excesos y molestias casi superan los beneficios.

Para empezar es un agravio tener que escuchar las conversaciones ajenas en lugares públicos a grito pelado. Sin duda estamos ante un problema de falta de educación, de afán de protagonismo y de pobreza intelectual. Además, me decepciona y entristece lo que le está ocurriendo a una inmensa mayoría de gente que está enganchada a los móviles en cualquier situación: reuniones de ocio, comidas y cenas, en bares, en transportes, etcétera. Se han acabado las reuniones tranquilas y charlas amenas con los amigos en los que los reunidos estaban presentes y atentos a la conversación. Ahora ya no hay casi nadie presente con los whatsapp, selfies, tweets, e-mails, mensajes de Facebook, fotos sin fin, filmaciones sin motivo y consultas en Internet que acaparan toda la atención.

No estoy en absoluto en contra de las nuevas tecnologías, todo lo contrario, las utilizo con buenos resultados, pero creo que, como con todo en la vida, en la moderación está el justo equilibrio. De verdad, tengo una gran añoranza de tiempos no muy lejanos.— Guillermo Martí Ceballos.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En