Cara lavada para vender maquillaje
Evitar las estridencias, desligarse de los dorados y los cromados, limpiar, indagar en lo invisible (la iluminación) para representar lo visible (el maquillaje). Nacho Lavernia y Alberto Cienfuegos han trabajado en este proyecto durante un año entero. Debían pensar qué puede aportar una marca de maquillaje y cosmética. Los diseñadores valencianos tenían que encontrar un hueco en el mercado y trabajarlo para construir en él una marca con la que comunicar su idea. Así, suyo es el packaging, el...
Evitar las estridencias, desligarse de los dorados y los cromados, limpiar, indagar en lo invisible (la iluminación) para representar lo visible (el maquillaje). Nacho Lavernia y Alberto Cienfuegos han trabajado en este proyecto durante un año entero. Debían pensar qué puede aportar una marca de maquillaje y cosmética. Los diseñadores valencianos tenían que encontrar un hueco en el mercado y trabajarlo para construir en él una marca con la que comunicar su idea. Así, suyo es el packaging, el diseño gráfico, el interiorismo, la propia marca y hasta los puntos de venta de las nuevas perfumerías Etnia, una cosmética sencilla que ha inaugurado tiendas en Madrid, Barcelona, Zaragoza y Valencia convencida de que hay un hueco para el maquillaje más allá del misterio del rimel negro y conocedora de que los perfumes más llevaderos se comunican mejor con transparencias que con oropeles.
Así, investigar el lado sutil de la cosmética y comunicarlo con limpieza de fondo blanco fue el objetivo de los diseñadores. ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo convertir una marca en productos y los productos en tienda?
El estudio valenciano ha trabajado para un cliente que no necesita estanterías pintadas de verde para pensar en productos frescos, o naturales. Un consumidor más maduro, con capacidad de juicio. Más cerebral que visceral. O más tranquilo que atropellado. Ese es el hueco. Comprar desde la tranquilidad.