Miseria patronal
Confundiendo derechos con privilegios, el presidente de la patronal CEOE Juan Rosell ha solicitado públicamente que los trabajadores con contrato fijo se reduzcan el sueldo para poder hacer más contratos indefinidos. Es una nueva forma de socialismo patronal mediante la cual se reparte el trabajo a costa de la masa salarial del total de trabajadores disponibles.
Es muy difícil creerse esto cuando la reforma laboral lo único que ha conseguido es facilitar ERE, despidos y rebajas salariales sin ninguna contrapartida en creación de empleo estable. El 96% del empleo creado este verano es pr...
Confundiendo derechos con privilegios, el presidente de la patronal CEOE Juan Rosell ha solicitado públicamente que los trabajadores con contrato fijo se reduzcan el sueldo para poder hacer más contratos indefinidos. Es una nueva forma de socialismo patronal mediante la cual se reparte el trabajo a costa de la masa salarial del total de trabajadores disponibles.
Es muy difícil creerse esto cuando la reforma laboral lo único que ha conseguido es facilitar ERE, despidos y rebajas salariales sin ninguna contrapartida en creación de empleo estable. El 96% del empleo creado este verano es precario. Solo hace falta esperar a octubre para comprobarlo. Por tanto, esta propuesta resulta bastante difícil de creer.
La CEOE se suma así a los corifeos de la Unión Europea y del FMI sugiriendo la rebaja salarial para ayudar a crear empleo.
Pues si son partidarios de eso lo primero que tiene que hacer toda esta gente que cobra 20.000 o 30.000 euros al mes es rebajarse en un 50% el sueldo. De este modo en España se podrían crear más de 100.000 empleos. Cuando empiecen ellos ya nos lo pensaremos los demás.— Rodrigo Córdoba García. Zaragoza.
Nuestros empresarios nos dicen: los trabajadores fijos tienen que perder ciertos “privilegios” para ser iguales que los trabajadores temporales. ¿Y por qué no dar a los trabajadores temporales los derechos de los trabajadores fijos?
Nuestros empresarios nunca piensan en los derechos de los trabajadores, solo en los derechos de los empresarios. Es normal, defienden sus “privilegios”.— Emilio Lozana Martín. Madrid.