Maritín Cencillo, filántropa y mecenas

Esposa del filántropo y coleccionista Bartolomé March Servera y por ello nuera del potentado y controvertido financiero Juan March Ordinas, María Cencillo González Campo, conocida por ‘Maritín’-, murió el día 22 julio a los 90 años. Aun en la rama económicamente secundaria de este linaje de poder y dinero ella fue quien más vida social mantuvo en la habitualmente discreta y compleja saga de los March.

Condesa de Pernia tomó la vicepresidente de la fundación privada que creó y dotó su esposo Bartolomé March Servera –al margen de la Fundación Juan March- y que cuenta como bienes propios l...

Esposa del filántropo y coleccionista Bartolomé March Servera y por ello nuera del potentado y controvertido financiero Juan March Ordinas, María Cencillo González Campo, conocida por ‘Maritín’-, murió el día 22 julio a los 90 años. Aun en la rama económicamente secundaria de este linaje de poder y dinero ella fue quien más vida social mantuvo en la habitualmente discreta y compleja saga de los March.

Condesa de Pernia tomó la vicepresidente de la fundación privada que creó y dotó su esposo Bartolomé March Servera –al margen de la Fundación Juan March- y que cuenta como bienes propios los palacios March de Palma y de Cala Rajada, con la destacada biblioteca de temas baleares, parte de la biblioteca de la casa Medinaceli y una importante colección de escultura contemporánea mundial. Madre de cuatro hijos y seis nietos, ella quedó en la sombra para restañar la imagen de su fundación tras una crisis familiar, con polémicas públicas y denuncias, a raíz del reparto de la herencia del mecenas y la interpretación de sus donaciones. Un célebre goya y un tríptico gótico ya no se exponen en el legado, al no concretarse la que distintos ejecutivos de la fundación interpretaron que era una donación prevista.

Maritín Cencillo, del brazo de los Reyes, en agosto 2010 hizo su última aparición pública al presentar la reforma de los grandes jardines de Cala Rajada, asolados en 2001 por una tormenta desaforada. Allí, al lado del faro de Capdepera que popularizó en su canción Joan Manuel Serrat, los March-Cencillo celebraban sus grandes fiestas que frecuentaba la familia Franco-Martínez Bordiu y otros vips y millonarios del régimen, que aparecían en ‘Hola’. En los jardines de Sa Torre Cega se desarrollaban los ya extintos recitales de rango de verano, en un pueblo donde aun recuerdan la labor benéfica entre los vecinos que desarrolló "doña Leonor Servera”, la mujer de Juan March Ordinas, devota y solidaria.

La Fundación Bartolomé March destacó de Maritín su "generosidad y dedicación" y su "vocación de apoyo a los más necesitados", además de su "actividad filantrópica”. La fundación impulsó el premio de novela breve Juan March Cencillo, a la memoria de uno de sus hijos, fallecido, con vocación intelectual.