Cartas al director

También elogio la Transición, pero…

Contra lo que dice Juan Francisco Fuentes en su carta del 9 de julio, mi afirmación de que Suárez y los suyos manipularon la ley electoral no es ninguna “teoría conspirativa del señor Urdánoz”, sino una teoría perfectamente documentada que comparte toda la literatura especializada. De hecho, la manipulación la reconoció en 1989 el mismísimo Oscar Alzaga: “(El sistema electoral) fue elaborado por expertos (…) y el encargo político real consistía en formular una ley a través de la cual el Gobierno pudiese obtener mayoría absoluta. Puesto que los sondeos preelectorales concedían a la futura UCD u...

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Contra lo que dice Juan Francisco Fuentes en su carta del 9 de julio, mi afirmación de que Suárez y los suyos manipularon la ley electoral no es ninguna “teoría conspirativa del señor Urdánoz”, sino una teoría perfectamente documentada que comparte toda la literatura especializada. De hecho, la manipulación la reconoció en 1989 el mismísimo Oscar Alzaga: “(El sistema electoral) fue elaborado por expertos (…) y el encargo político real consistía en formular una ley a través de la cual el Gobierno pudiese obtener mayoría absoluta. Puesto que los sondeos preelectorales concedían a la futura UCD un 36%-37% de los votos, se buscó hacer una ley en la que la mayoría absoluta pudiese conseguirse con alrededor del 36%-37%”.

En el artículo Todavía no sé quiénes, pero ganaremos, de Montero y Lago, disponible en Internet, quedan respondidas también —con apabullante documentación— las otras dos objeciones del señor Fuentes: que UCD todavía no existía en 1976 (Suárez y los suyos ya eran un grupo, después encontraron un nombre) y un posible sistema mayoritario (la oposición no hubiera aceptado).

Con respecto al último párrafo de la carta —que entiendo no dirigido contra mí ni contra Sotelo, claro… ¿por qué habría de estarlo?— estoy totalmente de acuerdo.

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Yo también defiendo la concordia y la Transición. Pero espero que eso no implique no poder criticar la versión oficial y edulcorada de la misma.— Jorge Urdánoz.

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