Fukushima en el mercado
El accidente nuclear de Fukushima ocurrió el 11 de marzo de 2011. En la semana bursátil que transcurrió entre el 14 y el 18 de marzo, el Gobierno japonés tuvo que inyectar muchos millones de euros para dar liquidez a sus corporaciones de negocios y evitar así la especulación excesiva con la divisa nipona, el yen. Tras el terremoto, el tsunami y la crisis nuclear, la caída del índice Nikkei pudo suponer un cuarto desastre casi natural; y lo califico de natural porque parece que está en la condición humana aprovecharse de las desgracias ajenas para enriquecerse. Especular, negociar siempre que s...
El accidente nuclear de Fukushima ocurrió el 11 de marzo de 2011. En la semana bursátil que transcurrió entre el 14 y el 18 de marzo, el Gobierno japonés tuvo que inyectar muchos millones de euros para dar liquidez a sus corporaciones de negocios y evitar así la especulación excesiva con la divisa nipona, el yen. Tras el terremoto, el tsunami y la crisis nuclear, la caída del índice Nikkei pudo suponer un cuarto desastre casi natural; y lo califico de natural porque parece que está en la condición humana aprovecharse de las desgracias ajenas para enriquecerse. Especular, negociar siempre que se pueda con ventajas competitivas, es la forma más natural de actuar de esos mercados, aunque pretendan revestirse de libre competencia, de igualdad ante la ley, y de responsabilidad social corporativa como corolario, casi fraternal, para esconder tanta codicia.— Luis Fernando Crespo Zorita.