Carla Bruni recupera los vaqueros y la guitarra

La exprimera dama saca disco, prepara gira y da carpertazo a su vida en el Elíseo

Carla Bruni durante su participación en el Festival de San Remo 2013.CORDON PRESS

Menos de un año después de haber dejado el Elíseo, la ex primera dama Carla Bruni no parece echar de menos su antigua vida. Ha dejado de lado los vestidos de alta costura, recuperado los vaqueros y trajes  pantalón, y, sobre todo, su querida guitarra. Volcada de nuevo en su carrera de cantante, que tuvo que dejar de lado cuando su esposo Nicolas Sarkozy era presidente francés, prepara la promoción de su nuevo disco, a la venta dentro de apenas un mes. El exmandatario por su parte cumple con su promesa de mantenerse un tiempo alejado de los focos. Entre sus obligaciones de conferenciante de luj...

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Menos de un año después de haber dejado el Elíseo, la ex primera dama Carla Bruni no parece echar de menos su antigua vida. Ha dejado de lado los vestidos de alta costura, recuperado los vaqueros y trajes  pantalón, y, sobre todo, su querida guitarra. Volcada de nuevo en su carrera de cantante, que tuvo que dejar de lado cuando su esposo Nicolas Sarkozy era presidente francés, prepara la promoción de su nuevo disco, a la venta dentro de apenas un mes. El exmandatario por su parte cumple con su promesa de mantenerse un tiempo alejado de los focos. Entre sus obligaciones de conferenciante de lujo y las numerosas visitas que recibe en su despacho parisiense, mantiene la incógnita sobre su intención de regresar o no a la primera plana de la política.

Faltan apenas unas semanas para la salida de Little French Songs, que en un principio se esperaba el pasado otoño pero que tuvo que ser aplazado al  1 de abril, y ya está todo en marcha. Hace un mes la nueva discográfica de Bruni, Barclay, publicada el primer single del disco, Chez Keith et Anita, cuyo vídeo está ya disponible en Youtube. Se trata de un homenaje a su amigo Keith Richards, el famoso guitarrista de los Rolling Stones. Describe una apacible velada en casa del músico, en la que ya de madrugada se toca a Chopin. Alguien pasa un porro, que ella declina porque no fuma, según asegura en la canción.

El pasado lunes la artista hizo pública en su perfil en Facebook la portada de este nuevo álbum. Es un bonito retrato en blanco en negro, en el que aparece escondida detrás de su guitarra y con la mirada perdida, soñadora. Este otoño tiene prevista una gira de promoción para la cual ya están fijada las primeras fechas en el Casino de París. La artista volverá así a subirse a los escenarios, algo a lo que tuvo que renunciar por motivos de seguridad cuando salió su último disco, Comme si de rien était, en julio de 2008. Entonces acababa de casarse con el presidente de Sarkozy. Hace un par de semanas la exmodelo ya hizo una primera aparición en el festival de San Remo, en Italia, donde interpretó su nueva canción y lució su nuevo look sencillo, con traje de pantalón gris y el pelo suelto.

El entorno tanto de ella como de su esposo asegura que la política ha pasado así a un segundo plano en la vida de la pareja. Mientras que ella se centra en su disco, Sarkozy mantiene su ritmo de conferencias por todo el mundo y sigue recibiendo en su despacho de la calle Miromesnil a un amplio abanico de personalidades del ámbito político, pero también deportivo y artístico. A finales de enero, cumplió 58 años. A la cena de aniversario, organizada por su esposa, asistieron una treintena de personas, entre las cuales el actor y ex de Carla, Vincent Perez, el cantante Didier Barbelivien o el empresario Dominique Desseigne. Tan solo tres políticos se encontraban entre los invitados: Isabelle y Patrick Balkany y el exministro del Interior y fiel entre los fieles Brice Hortefeux.

Pese a todo, la política nunca está muy lejos. Los amigos de Sarkozy, reunidos en una asociación que acaba de renovar su portal en internet y destinada en principio a defender su balance, se encargan de mantener presente la posibilidad de un regreso del exmandatario a la política. Las últimas especulaciones sobre su posible retorno las disparó él mismo en su cena de cumpleaños con estas palabras: “estoy contento, no estén tristes porque no hay ni una sombra de tristeza en mí”. Antes de concluir: “Nos veremos pronto”.

La propia Bruni hacía estas demoledoras previsiones a la revista digital Atlántico hace apenas unas semanas, en referencia a las próximas elecciones presidenciales de 2017. “Hollande, no es muy bueno. Y vamos a tenerle diez años. Porque dentro de cinco años, es [la líder ultraderechista] Marine Le Pen quien se enfrentará a él en segunda vuelta, y por supuesto, ganará”, asegruaba. “Es cierto que Nicolas podría evitarle a Francia este duelo horrible. Pero por mi parte, no tengo ninguna ganas de que vuelva. Somos muy felices con nuestra nueva vida”.

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