Damien Hirst llora por amor

La mujer del artista mejor pagado del mundo y madre de sus tres hijos lo abandona por un exoficial del ejército británico

Damien Hirst y su excompañera, Maia Norman.GETTY

Damien Hirst, el artista mejor pagado del mundo, desveló a sus amigos este fin de semana que estaba “devastado” tras descubrir que su compañera desde hace más de 20 años y madre de sus tres hijos le había abandonado por un coronel retirado del Ejército Británico. Dio la noticia durante una fiesta con toboganes y atracciones que ofreció en su casa de Devon. Acostumbrado a la polémica, Hirst optó por un escenario lúdico para comunicar su desengaño amoroso, buscando crear un impacto simila...

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Damien Hirst, el artista mejor pagado del mundo, desveló a sus amigos este fin de semana que estaba “devastado” tras descubrir que su compañera desde hace más de 20 años y madre de sus tres hijos le había abandonado por un coronel retirado del Ejército Británico. Dio la noticia durante una fiesta con toboganes y atracciones que ofreció en su casa de Devon. Acostumbrado a la polémica, Hirst optó por un escenario lúdico para comunicar su desengaño amoroso, buscando crear un impacto similar al que provocan sus animales preservados en formol o su famosa calavera humana incrustada en diamantes.

La causante de su desolación, la diseñadora californiana de 49 años Maia Norman, eligió un escenario completamente diferente para hacer oficial la ruptura con Hirst. Hace diez días se besó con su nuevo amante, el exoficial Tim Spicer, 10 años mayor que ella, en un hotel de Hollywood, frente a 150 periodistas que habían asistido a la etapa final de un rally de 5.000 kilómetros por Estados Unidos, que Norman acababa de completar. Cuando fue preguntada si Spicer era su nueva pareja, contestó con un lacónico “sí”. Nada que ver con la reacción de su excompañero.

Acostumbrado a la polémica, Hirst optó por un escenario lúdico para comunicar su desengaño amoroso

La diseñadora y Hirst se conocieron a finales de los ochenta a través de la pareja de aquélla, el marchante de arte Jay Joplin. Desde entonces, ella acompañó al artista a comprar formol para sus obras; compartió con él fiestas, droga y desenfreno, y estuvo a su lado cuando éste se desintoxicó en 2002. Pero Norman no se resistió a quedar eclipsada por el éxito de su compañero -nunca se han casado-. Una “adicta a la adrenalina”, como ella se ha descrito a sí misma en varias entrevistas, en 2007 retomó su trabajo al frente de la firma de moda Mother of Pearl, de la que la cantante Lily Allen y la modelo Elle McPherson, entre otras, son clientas habituales.

Mientras en los últimos años un Hirst muy alejado de su imagen de polémico enfant terrible del mundo del arte prefería quedarse en casa para cuidar de sus hijos de 16, 12 y siete años, Norman mantenía intacta su pasión por el surf, los bólidos o los viajes a toda velocidad por el Támesis a bordo de su lancha motora. El artista, que siempre había reconocido su pánico a dejar de parecer joven -el lema de Mother of Pearl es Keeping young (Manteniéndose joven)-- había claudicado a los patrones propios de su edad, 47 años. “Me estoy haciendo mayor”, reconoció hace unos meses en una entrevista.

Norman mantenía intacta su pasión por el surf, los bólidos o los viajes a toda velocidad por el Támesis

Buscando nuevas emociones, Norman encontró a Spicer, un hombre con bastante éxito entre las mujeres, según varios diarios británicos, y con un dudoso pasado tras dejar el Ejército que le valió el apelativo de 'el rey de los mercenarios' por parte de la revista Vanity Fair. En 1999 publicó su autobiografía, Un soldado poco ortodoxo. Paz y guerra y la aventura de Sandline, y en 2002 creó Aegis Defence Services, una empresa militar con la que ha firmado contratos millonarios con el Gobierno de EE UU.

Hay quien detrás de la desolación de Hirst por su desamor solo ve una nueva campaña para generar publicidad, algo que el artista ha demostrado que sabe hacer muy bien. Lo que es seguro es que a Norman su decisión le saldrá más cara que las lágrimas de Hirst. A no ser que la pareja hubiera acordado previamente un contrato ventajoso en caso de separación, no es probable que disfrute de los más de 1.000 millones de dólares (792 millones de euros) en los que se cifra la fortuna personal del artista o que vuelva a hacer surf en las casas que ambos compartían en Devon, México o Bali.

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