Absuelto el líder de PxC de la agresión a su hijo tras ser retirada la denuncia

El informe médico certifica una lesión en el cuello al vástago del líder político

El juzgado de lo penal número 3 de Manresa ha absuelto al líder de Plataforma per Catalunya (PxC), Josep Anglada, de un delito de malos tratos en el ámbito familiar, acusado por su hijo de una agresión en 2008 tras discutir por un gato, y quien en el último momento retiró la denuncia. El magistrado no ha visto pruebas suficientes para inculpar al político, y ha explicado en su sentencia que solo tiene el informe del médico de las lesiones: "menoscabos físicos consistentes en eritema cervical posterior y dolor de muñeca".

La sentencia se produce después de que su hijo retirase los cargos...

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El juzgado de lo penal número 3 de Manresa ha absuelto al líder de Plataforma per Catalunya (PxC), Josep Anglada, de un delito de malos tratos en el ámbito familiar, acusado por su hijo de una agresión en 2008 tras discutir por un gato, y quien en el último momento retiró la denuncia. El magistrado no ha visto pruebas suficientes para inculpar al político, y ha explicado en su sentencia que solo tiene el informe del médico de las lesiones: "menoscabos físicos consistentes en eritema cervical posterior y dolor de muñeca".

La sentencia se produce después de que su hijo retirase los cargos antes del juicio que se celebró la semana pasada en Vic, y en el que ni Anglada ni su vástago, de 22 años, quisieron declarar, pero donde el fiscal mantuvo la petición de 10 meses de prisión y una orden de alejamento de un año.

La culpa, del gato

Durante esa vista, ante la negativa de los dos a declarar, se leyó la declaración que el hijo había hecho durante la instrucción, donde dijo que la noche de los hechos el padre iba bebido, y que primero le empujó y más tarde le pegó en el cuello -lesión que confirma el informe médico-, tras una discusión originada, según reconoció su padre, por un gato. También declaró que Anglada llegó borracho a casa, algo que según él era habitual, y se enfadó porque el gato había entrado en una de las habitaciones.

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