El puerto de Alicante rechaza acoger una zona para el 'botellón'

Alega motivos jurídicos y operativos para oponerse a la propuesta de la alcaldesa de acotar en sus instalaciones un área controlada para los fines de semana

La iniciativa de la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, del PP, de instalar en el recinto portuario un área para acoger, de manera controlada, el botellón de fin de semana, ha encallado en los intereses de la Autoridad Portuaria de Alicante (APA). El organismo acaba de hacer público un comunicado en el que rechaza la propuesta de la regidora sobre la base de las conclusiones en contra de sendos informes, uno de carácter jurídico y otro operativo. "Ambos informes determinan la incompatibilidad con los usos y actividades permitidos en el Plan de Utilización de los Espacios Portuarios (P...

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La iniciativa de la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, del PP, de instalar en el recinto portuario un área para acoger, de manera controlada, el botellón de fin de semana, ha encallado en los intereses de la Autoridad Portuaria de Alicante (APA). El organismo acaba de hacer público un comunicado en el que rechaza la propuesta de la regidora sobre la base de las conclusiones en contra de sendos informes, uno de carácter jurídico y otro operativo. "Ambos informes determinan la incompatibilidad con los usos y actividades permitidos en el Plan de Utilización de los Espacios Portuarios (PUEP) vigente", recoge la nota.

"Los terrenos en que se pretende instalar la citada actividad (en el muelle 10, en las inmediaciones de la carpa de la Volvo Ocean Race) se encuentran destinados a usos portuarios, en concreto náutico-deportivos y complementarios", explica el comunicado. "El informe técnico elevado a la presidencia de la Autoridad Portuaria de Alicante señala, por otra parte, que la imprescindible instalación de una vallado de seguridad en el muelle resulta por completo incompatible con el atraque de barcos en el mismo", añade.

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La posibilidad de ubicar en el puerto una zona acotada para acoger el botellón fue planteada por la alcaldesa en el reunión de la junta de seguridad local el pasado mes de marzo. Este organismo dio el visto bueno a la iniciativa por unanimidad, incluidos los dos representantes de la Autoridad Portuaria. Castedo apostó por esta fórmula ante las quejas de los vecinos por las molestias de la práctica espontánea del botellón en diversos puntos de la ciudad. Uno de estos focos se localiza en el espigón de la playa de El Postiguet, a la espalda de dos hoteles ubicados en la frontera entre la ciudad y el recinto portuario. Estos locales reclamaron la eliminación de esa zona de botellón, pero, en paralelo, también se mostraron en contra de habilitar una zona restringida y controlada en el interior del puerto.

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