Anecdotario de una calurosa jornada
No todos los colegios electorales permanecen abiertos de 9.00 a 20.00 horas como manda la ley. Ha habido uno que sólo ha funcionado durante la primera media hora: la única mesa de la localidad riojana de Navajún cerró a los 30 minutos de comenzar la votación ya que todos sus habitantes habían depositado ya su papeleta. Y no hubo grandes colas: en el pueblo sólo hay 16 personas con derecho a voto.
Por lo general, la constitución de las mesas se ha realizado sin sobresaltos y, en algún caso, erigiéndose en un gran ejemplo de integración. Una mujer sordomuda ha ocupado su pue...
No todos los colegios electorales permanecen abiertos de 9.00 a 20.00 horas como manda la ley. Ha habido uno que sólo ha funcionado durante la primera media hora: la única mesa de la localidad riojana de Navajún cerró a los 30 minutos de comenzar la votación ya que todos sus habitantes habían depositado ya su papeleta. Y no hubo grandes colas: en el pueblo sólo hay 16 personas con derecho a voto.
Por lo general, la constitución de las mesas se ha realizado sin sobresaltos y, en algún caso, erigiéndose en un gran ejemplo de integración. Una mujer sordomuda ha ocupado su puesto como vocal en Baracaldo (Vizcaya) acompañada de un intérprete que ha puesto la Administración. La mujer había sido designada primera suplente: al no comparecer el vocal segundo, la suplente ha ocupado su puesto voluntariamente, ya que ha sido informada de que los disminuidos físicos, psíquicos o sensoriales tienen la opción de renunciar. Tras poner un intérprete al servicio de la discapacitada, la mesa se ha constituido con normalidad.
Una normalidad que se ha visto rota en Foz-Calanda porque la secretaria del Ayuntamiento de esta localidad de Teruel se ha puesto de parto justo en el momento de constituirse la mesa electoral y ha tenido que ser sustituida. Así lo ha relatado la subdelegada del Gobierno en Teruel, María Victoria Álvarez Sevilla, quien ha explicado que ésta ha sido la única anécdota que se ha producido en la constitución de las 338 mesas electorales de la provincia.
En Rubí (Barcelona), un invidente ha pedido al presidente de su mesa electoral que haga constar en el acta de incidencias que no ha votado porque no existen papeletas en braille, lo que vulnera su derecho constitucional a ejercer el voto secreto puesto que necesita que otra persona le facilite la papeleta del partido al que quiere dar su apoyo.