Andrea Monleon (Motorola): “La conciliación siempre se asocia a los niños, pero nos olvidamos de nosotros mismos”
Enamorada de Madrid, ha trabajado en grandes multinacionales tecnológicas como Xiaomi, Oppo, Samsung o BlackBerry
Ingeniera de telecomunicación de 45 años, la valenciana Andrea Monleon dirige desde 2023 Motorola en España y Portugal, empresa donde empezó como becaria y a la que volvió tras trabajar en Xiaomi, Oppo, Samsung o BlackBerry.
P. ¿Qué quería ser de pequeña?
R. No quería ser ingeniera, quería ser médico. Mis padres, médicos los dos, me desanimaron mucho y me enfocaron a una carrera técnica porque era buena en ciencias. Para mí es una espinita. No es una crítica a mis padres, pero sí que creo que hay que dejar que uno intente hacer lo que siente.
P. Se fue a vivir a Madrid después de la carrera y lleva 20 años. ¿Contenta?
R. Me encanta Madrid. Desde los 24 años hasta los 45 he vivido diferentes etapas, me parece una ciudad impresionante. Ahora tengo tres niños y la disfruto de otra manera.
P. ¿Tiene tiempo para usted en su día a día?
R. Voy dándole más peso con los años al autocuidado y al cuidado familiar. Reconozco que durante un tiempo ha habido una apuesta muy clara por mi carrera, y con el paso del tiempo me he dado cuenta que tenía que trabajar otras cosas. No me refiero tanto a tener tiempo con los niños, que obviamente tienes que tenerlo. Hablo del autocuidado, de buscar huecos para respirar. Porque la conciliación siempre se asocia a los niños, siempre nos olvidamos de nosotros mismos.
P. ¿Qué cosas no perdona?
R. Las cenas con mis tres hijos. También busco espacios de soledad de 20 o 30 minutos a primera hora de la mañana. He descubierto el maravilloso mundo de la respiración. Intento buscar huecos con amigos.
P. ¿Qué valor le da al dinero?
R. No es un fin en sí mismo. No pienso en tener más, sino que es una herramienta para tener las cosas que para mí son realmente importantes con un riesgo controlado. Es una herramienta para tener mis básicos cubiertos y con cierta tranquilidad.
P. ¿Aficiones?
R. Viajar me encanta. Tengo algún viaje en el tintero, como el de Japón. Me encanta la gastronomía y cultura japonesa. El deporte es una asignatura pendiente, me gusta mucho pasear.
P. ¿Un japonés para ir a comer en Madrid?
R. El Miyama de la Castellana.
P. Trabajando en Motorola, ¿cómo lleva la conexión al móvil?
R. A la hora de cenar con los niños no hay presencia de móviles. El móvil es una herramienta fundamental para la vida profesional y personal, pero también un elemento de mucha distracción en la comunicación con los niños.
P. ¿Qué se le da bien?
R. Me relaja mucho cocinar, otra cosa es que se me dé bien. A mitad de la receta empieza el camino de la frustración…
P. ¿Qué tal lleva el estrés?
R. Bien, tiene sus picos. Llevo años trabajando bajo presión, creo que me manejo bien.
P. ¿Qué es lo que más le preocupa si piensa en el futuro?
R. Me preocupa hacia dónde vamos en relación a mis hijos. Es un pensamiento que me agita. No sé si les vamos a dar las herramientas necesarias para el mundo que se van a encontrar dentro de 20 años. Por mí no siento esa angustia, me pasa con mis hijos.
P. ¿Qué lugar ocupa el sentido del humor en su vida?
R. Altísimo. Hay que pasarlo bien, tanto en el trabajo como en la vida personal.
P. ¿Se considera una persona feliz?
R. La verdad es que sí. Me río cada día, estoy tranquila. Todo mi entorno está bien. Me considero una privilegiada.