Alemania aprueba unos presupuestos con la mayor creación de nueva deuda desde la pandemia
En total, junto con el presupuesto ordinario y los fondos especiales para inversiones y defensa, el Gobierno podrá gastar unos 630.000 millones de euros
El Parlamento alemán ha aprobado este viernes el presupuesto para el próximo año, que prevé el segundo mayor endeudamiento en la historia de la República Federal de Alemania. De los gastos, que ascienden a unos 525.000 millones de euros, casi 100.000 millones se financiarán mediante créditos. A ello se suman unos 83.000 millones de euros en deuda adicional a través de los denominados fondos especiales para las Fuerzas Armadas, así como para infraestructuras y la protección del clima.
Tras una semana de debate sobre los presupuestos y el elevado endeudamiento de más de 180.000 millones de euros, el borrador ha recibido finalmente luz verde con 322 votos a favor y 252 en contra. En total, junto con el presupuesto ordinario y los fondos especiales para inversiones y defensa, el Gobierno podrá gastar unos 630.000 millones de euros el año próximo.
La elevada creación de deuda es posible gracias a que los conservadores y socialdemócratas, con ayuda de los Verdes, consiguieron relajar considerablemente las normas de endeudamiento el pasado mes de marzo. Lo hicieron tras las elecciones generales, pero antes de que se disolviera el antiguo Parlamento en el que que aún tenían la mayoría necesaria para modificar la ley.
En el marco de esa reforma constitucional, se creó un fondo especial para inversiones en infraestructuras y protección del clima de 500.000 millones de euros. Estos se podrán financiar durante 12 años con créditos no sujetos al freno de deuda, que establece que en tiempos de normalidad económica no se puede superar el 0,35 % del PIB anual. El dinero debe destinarse principalmente a puentes, escuelas o ferrocarriles en mal estado. No debería utilizarse para tapar otros agujeros presupuestarios, como alertan los principales economistas del país. Además, la reforma exime del cumplimiento del freno de la deuda a todo gasto en defensa que supere el 1 % del PIB.
El Gobierno de Friedrich Merz defiende sus planes presupuestarios, frente a las duras críticas de la oposición, como una ofensiva de inversión para todo el país. El objetivo, señalan, es conseguir que la economía alemana vuelva a ser “competitiva” para que las empresas puedan crecer, innovar y crear puestos de trabajo. El ministro de Finanzas y vicecanciller alemán, Lars Klingbeil, ha defendido este viernes en el Parlamento federal la necesidad de acometer inversiones récord para que Alemania vuelva “a la senda del crecimiento”. “También es importante que las inversiones fluyan rápidamente, que aceleremos el ritmo, que reduzcamos la burocracia, que aumentemos las autorizaciones y que nos aseguremos de que se inviertan en nuestro país”, ha apuntado.
De esta manera, muchos ministerios dispondrán de más dinero el año que viene que en 2025. El que más se beneficia es el ministro de Defensa, Boris Pistorius. En el presupuesto ordinario de 2026, dispondrá de alrededor de un tercio más de dinero que en el año en curso, hasta un total de 83.000 millones de euros. A esto se suman otros miles de millones del llamado fondo especial para las Fuerzas Armadas, creado poco después del inicio de la invasión rusa de Ucrania en 2022. En total, el gasto en Defensa ascenderá a unos 108.000 millones de euros, la cifra más alta desde el final de la Guerra Fría. El dinero se destinará, por ejemplo, a equipamiento militar y munición, y gran parte se financia mediante créditos. Mientras, Ucrania recibirá 11.500 millones de euros para artillería, drones, vehículos blindados y otros equipos. Según el Ministerio de Defensa, es la cantidad más alta desde que el ataque de Rusia.
Además del capítulo militar, uno de los problemas a los que se ha tenido que enfrentar el Gobierno para cerrar el presupuesto del próximo año ha sido el aumento constante del gasto social. Más de un tercio del presupuesto total se destina a la partida de la ministra de Trabajo y Asuntos Sociales, Bärbel Bas, para hacer frente, sobre todo, a las pensiones de jubilación y al aumento del gasto en el seguro médico y seguro de dependencia. En concreto, dispondrá de más de 197.300 millones de euros
A esto se suma que la carga de intereses se duplicará hasta 2029. El Gobierno ya paga 34.000 millones de euros al año en intereses. Para 2029, esta suma podría alcanzar los 66.500 millones de euros. Dinero que en el futuro ya no estará disponible para inversiones, por lo que la economía debería reactivarse pronto para que aumenten los ingresos fiscales del país. “En el Gobierno haremos todo lo posible para que nuestra economía vuelva a funcionar por fin”, prometió Klingbeil. De momento, el consejo de expertos económicos que asesora al Gobierno, conocido como el Consejo de los Cinco Sabios, prevé un crecimiento del PIB del 0,2 % este año y del 0,9 % en 2026.