Ryanair cierra en Vigo y golpea a Canarias y Santiago con su ajuste en aeropuertos regionales
La aerolínea de bajo coste reduce su oferta para la temporada de invierno en un millón de plazas, manteniendo su ausencia en Valladolid y Jerez y con nuevos recortes en Asturias, Santander, Zaragoza y Vitoria
El tijeretazo de capacidad de Ryanair en los aeropuertos regionales españoles tiene ya cifras y emplazamientos: Santiago, Vigo, Valladolid, Jerez, Santander, Zaragoza, Asturias, Vitoria y Canarias. El golpe es duro para la próxima temporada aérea de invierno (de finales de octubre a finales de marzo), con una rebaja de un millón de asientos respecto a lo que la low cost programó en el periodo invernal 2024-2025. El impacto, sostiene el Ministerio de Transportes, será muy limitado a la vista de que el millón de plazas supone un 0,7% frente a los 137 millones de la programación total que ha recibido Aena para este invierno.
La compañía aérea líder por tráfico en España (62 millones de viajeros al año) va a reducir su oferta un 41%, o en 600.000 asientos, en aeropuertos de provincias en la península, y en un 10% en el mercado canario, lo que se traduce en 400.000 plazas menos en las islas al borrar 19 rutas del mapa. Estas últimas se reparten entre los aeropuertos de Tenerife Norte, del que sale en la temporada baja, y los de Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaria.
El consejero delegado de la compañía aérea, Eddie Wilson, ha afirmado en rueda de prensa que “España es un país cerrado al turismo”, culpando de los recortes a la política tarifaria de Aena. El ejecutivo ha reiterado que el gestor aeroportuario “ha fallado a las regiones españolas, cuyos aeropuertos están vacíos casi en un 70% de su capacidad”.
La reina del low cost ha decidido clausurar su base de dos aviones en Santiago, de donde retira 453.000 asientos (el 80% de su capacidad en ese punto) y siete rutas como el mayor de todos los ajustes. La medida en Vigo es suspender todas las operaciones a partir del 1 de enero, quitando del mercado 31.000 asientos y dos rutas. Vuelven a estar en la lista del ajuste, tal y como ha sucedido en la presente temporada de verano, los aeropuertos de Valladolid y Jerez, de los que la compañía continuará desaparecida esta temporada de invierno. Valladolid pierde 26.000 asientos de Ryanair en la ruta Madrid-Barcelona, que ahora ocupa Vueling, y Jerez se deja 28.000 asientos con la marcha de la low cost en la temporada baja.
Además, la capacidad ofertada cae un 45% en Zaragoza (70.000 plazas menos); baja un 38% en Santander (84.000 asientos de ajuste); Asturias pierde un 16% de las plazas (11.000) respecto a las desplegadas en la temporada invernal 2024-2025, y el repliegue es del 2% en Vitoria (2.000 asientos).
El directivo ha recordado que su aerolínea espera 300 aviones nuevos y los colocará en los mercados más competitivos. Ryanair habrá reducido en dos millones de asientos su oferta en España a lo largo del presente 2025 una vez que ya recortó 800.000 en la actual temporada de verano, protagonizando un sonado enfrentamiento con Aena y el Ministerio de Transportes por la senda tarifaria. El tono crítico de Ryanair con la acción del gestor aeroportuario es un clásico en el sector aéreo desde hace años, ya sea por los precios que se cobran a las aerolíneas o por el rechazo a la petición de nuevos incentivos al tráfico.
Las tarifas subirán un 6,6% en 2026 (68 céntimos de euro por viajero), lo que ha sido calificado por Ryanair como una “decisión descarada”. Wilson ha afirmado que no busca ventajas exclusivas para su compañía sino incentivos para todo un sector y el turismo en provincias. Durante su presentación ha explicado que podría traer 33 aviones adicionales a España de aquí a 2031, subiendo a 77 millones de viajeros anuales (+40%) y abriendo bases regionales. Todo ello precisaría la creación de un millar de puestos de trabajo. Pero Ryanair pone condiciones: congelación tarifaria, no invertir más de lo necesario en las ampliaciones de Barajas y El Prat, incentivos a los combustibles sostenibles, y medidas para hacer más competitivos a los aeropuertos regionales. Se trata de un plan totalmente descartado por el Gobierno.
Los asientos que salen del programa de Ryanair en España se destinarán a “aeropuertos más eficientes que desean desarrollar el tráfico, en particular los de Italia, Marruecos, Croacia, Suecia y Hungría”. Sobre la afectación total este invierno, la empresa contabiliza la retirada de 36 conexiones directas de un total de 750 rutas. “La mala gestión de Aena y el Gobierno español está contribuyendo directamente a la pérdida de puestos de trabajo locales, conectividad e inversión”, ha sentenciado el consejero delegado.
En el caso de Canarias, la compañía mantiene a salvo de momento su actividad en Tenerife Sur, principal destino en las islas en lo que va de año. Allí es líder entre enero y julio con 11.670 operaciones, lo que se traduce en un 22,6% de cuota de mercado. El anunciado cierre en Tenerife Norte es más efectista que otra cosa al no estar ese aeropuerto entre los principales de Ryanair en el archipiélago. Apenas conecta esa infraestructuras con vuelos domésticos. Su puesto sí es destacado en Lanzarote, donde es primera aerolínea con una cuota del 18,8% (7.694 operaciones hasta final de julio); la irlandesa tiene la segunda posición en Fuerteventura, con un 13,7% de cuota (4.613 aterrizajes y despegues), y es la quinta referencia en Gran Canaria, donde tiene un 6,9% del mercado.
Sin noticia de los aeropuertos grandes
La programación de invierno en los mayores aeropuertos españoles, como los de Madrid, Barcelona, Palma, Málaga o Alicante, no ha sido desvelada aún. Se da por descontado que la irlandesa va a reforzarse en esos emplazamientos esenciales para su negocio. De hecho, su oferta total para el periodo que va de final de octubre a la conclusión de marzo podría saldarse con crecimiento neto, tal y como ha sucedido este verano a pesar de reducir posiciones en infraestructuras regionales.
España es el segundo mercado por generación de ingresos para esta low cost, solo superado por el italiano. De hecho, Eddie Wilson ha remarcado el compromiso de Ryanair con este país, “pero no podemos justificar una inversión continuada en aeropuertos cuyo crecimiento se ve bloqueado por tasas excesivas y poco competitivas”.
Desde Ryanair se recuerda que uno de cada tres turistas que llega a España por vía aérea lo hace en sus aviones. También pone cifras a su contribución a la economía española, con 28.000 millones de euros anuales entre efectos directos e indirectos. Desde esta posición de empresa sistémica para el turismo, pide la colaboración de las instituciones españolas para “estimular el tráfico en las zonas que necesitan capacidad, conectividad e inversión”. En la rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede de la compañía aérea se ha vuelto a instar a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y al propio Gobierno a rechazar la propuesta tarifaria de Aena.