Un grupo de inversores ofrece 5.800 millones de dólares por los grandes almacenes Macy’s
La oferta de Arkhouse Management y Brigade Capital supone una prima del 20,8% sobre la cotización en Bolsa
Las firmas Arkhouse Management y Brigade Capital Management han presentado una oferta para comprar la empresa de grandes almacenes Macy’s por unos 5.800 millones de dólares (unos 5.400 millones de euros). Esos inversores, que ya son accionistas de la empresa, ofrecen comprar las acciones que no poseen a un precio de 21 dólares por acción, según adelantó The Wall Street Journal y confirmaron diversos medios. La operación supondría la exclusión de Bolsa del lí...
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Las firmas Arkhouse Management y Brigade Capital Management han presentado una oferta para comprar la empresa de grandes almacenes Macy’s por unos 5.800 millones de dólares (unos 5.400 millones de euros). Esos inversores, que ya son accionistas de la empresa, ofrecen comprar las acciones que no poseen a un precio de 21 dólares por acción, según adelantó The Wall Street Journal y confirmaron diversos medios. La operación supondría la exclusión de Bolsa del líder mundial de los grandes almacenes, dueño de las enseñas Macy’s, Bloomingdale’s, más exclusiva, y Bluemercury.
El precio ofrecido implica una prima del 20,8% sobre la última cotización en Bolsa, de 17,39 dólares por título. La propuesta se presentó el 1 de diciembre, aunque no había trascendido hasta ahora. En ese momento suponía una prima de más del 32% sobre la cotización de cierre del 30 de noviembre (15,86 dólares), pero las acciones se han revalorizado un 9,6% desde entonces. Macy’s marcó un máximo histórico a unos 70 dólares por acción a mediados de 2015 y un mínimo por debajo de los 5 dólares en abril de 2020, poco después de estallar la pandemia. Se recuperó con fuerza en 2021 y 2022, pero este año cotizaba de nuevo a la baja. Este lunes, en la apertura del mercado, las acciones se han disparado cerca de un 20%, acercándose al precio de la oferta.
La competencia del comercio electrónico, las tiendas de descuento y los especialistas ha mermado sus ventas y resultados desde entonces. A la crisis de modelo de los grandes almacenes se han sumado las dificultades económicas derivadas de la alta inflación y las subidas de los tipos de interés, que han llevado a los consumidores a dejarse más dinero en el carrito de la compra y en el surtidor de la gasolinera y a medir mucho el gasto discrecional. Otros minoristas como JCPenney, Neiman Marcus o Bed, Bath & Beyond se han declarado recientemente en bancarrota.
Macy’s, que ha atravesado varias crisis en las últimas décadas, está tratando de encontrar nuevas vías de crecimiento, entre ellas las marcas propias, un marketplace digital abierto, las tiendas de pequeño formato, la apuesta por el lujo y las ofertas personalizadas para fidelizar clientes, según ha explicado a los analistas.
Arkhouse Management es una firma centrada en inversiones inmobiliarias, mientras que Brigade Capital es una gestora global de inversiones alternativas especializada en estrategias de inversión crediticia. La principal ubicación de Macy’s es su gran tienda de Herald Square, en pleno corazón de Manhattan. Otro inversor, Starboard Value, presionó entre 2015 y 2017 para que la empresa pusiera en valor sus activos inmobiliarios y considerara la posibilidad de formar un vehículo donde agruparlas. Macy’s también se convirtió en el objetivo de la firma de inversión activista Jana Partners, que instó a la empresa en 2021 a aumentar su valoración mediante la escisión de su negocio de comercio electrónico. La empresa lo estudió, pero lo descartó finalmente. En 2017, Hudson’s Bay, dueño de Saks, mantuvo conversaciones iniciales para una posible adquisición, aunque las negociaciones finalmente fracasaron.
Ingresos a la baja
En los tres primeros trimestres del actual ejercicio fiscal (de febrero a octubre), Macy’s ha tenido unos ingresos de 15.491 millones de dólares, un 8% menos que el año anterior. La compañía ha logrado en esos nueve meses unos beneficios de 175 millones, muy por debajo de los 668 millones del mismo periodo del año anterior. Falta aún el cuarto trimestre, el más dinámico y rentable por las ventas navideñas.
Macy’s espera cerrar el ejercicio con unas ventas situadas entre los 22.900 y los 23.200 millones de dólares, con una caída de entre el 6% y el 7% con respecto al ejercicio anterior, según comunicó recientemente a los analistas. De esa cifra, cerca de un tercio serían ventas digitales.
“Tras el Día de Acción de Gracias, entramos en nuestro periodo de ventas más importante. Hemos perfeccionado nuestro surtido de regalos y mejorado la experiencia de compra. Sabemos que nuestros clientes buscan valor, por lo que hemos simplificado nuestras promociones. Confiamos en que los cambios estratégicos que hemos realizado serán bien recibidos por nuestros clientes”, decía su presidente y consejero delegado, Jeff Gennette, en la conferencia con analistas del pasado 17 de noviembre.
El grupo tenía a cierre del tercer trimestre 784 establecimientos en 723 localizaciones. La compañía lleva esa doble contabilidad porque hay localizaciones multitienda. De los 784 establecimientos, 494 correspondían a los grandes almacenes Macy’s, 34 a Bloomingdale’s y 158 a Bluemercury, la cadena de tiendas de belleza que compró en 2015. A eso se suman tiendas de muebles, de descuento y de pequeño formato. El grupo tenía 110.400 empleados a 28 de enero pasado.
La empresa fundada en 1858 anunció en octubre que iba a acelerar la expansión de sus tiendas de pequeño formato para atender a los compradores que buscan ubicaciones más cómodas. El grupo planea sumar hasta 30 nuevos establecimientos de formato pequeño hasta el otoño de 2025, con lo que el número total de tiendas de este tipo ascenderá a 42. La siguiente ronda de expansión comenzará en otoño de 2024.
La compañía tiene una deuda a largo plazo de unos 3.000 millones de dólares, además de otros 3.000 millones en compromisos por alquileres.
El actual consejero delegado será sustituido en febrero por Tony Spring, que ha estado al frente de Bloomingdale’s entre 2014 y 2023. En su última conferencia con analistas, Gennette hizo balance de su gestión: “Me gustaría comentar mis siete años como consejero delegado. Aunque no he conseguido todo lo que me había propuesto, estoy orgulloso de mi contribución. Salimos de la pandemia como una empresa más sana y ágil, apoyándonos en herramientas y procesos basados en datos para orientar un enfoque renovado en las disciplinas de gastos e inventario. Además, mejoramos significativamente la salud de nuestro balance, redujimos la deuda, retrasamos los vencimientos importantes hasta 2027 y ampliamos el plazo de nuestra línea de crédito”, dijo. “Estoy seguro de que se han sentado las bases para seguir construyendo el legado de Macy’s como piedra angular de la cultura y el estilo estadounidenses”, añadió.
El directivo inició su mandato con una reestructuración que implicó el cierre de numerosos establecimientos y el despido de miles de empleados. Gennette también ha impulsado nuevos formatos comerciales y marcas propias, además de buscar nuevos proveedores.
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