Las ventas de coches diésel caen en julio a mínimos históricos

Clientes y marcas olvidan esa tecnología, cada vez más ausente de los catálogos y que representó el 12% de las ventas

Surtidor de gasolina en el que es posible elegir diferentes tipos de combustibles.

Los coches diésel ya no son lo que eran. Los clientes desconfían de ellos y los fabricantes los han casi excluido de sus catálogos. La consecuencia es que sus ventas se han ido achicando en los últimos años y, en España, en julio marcaron un mínimo histórico. Apenas 12 de cada 100 vehículos matriculados (un 11,9% del total) en el séptimo mes del año consumían ese combustible.

La tendencia es global. En la primera mitad del año la patronal europea de la automoción, ACEA, advirtió que...

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Los coches diésel ya no son lo que eran. Los clientes desconfían de ellos y los fabricantes los han casi excluido de sus catálogos. La consecuencia es que sus ventas se han ido achicando en los últimos años y, en España, en julio marcaron un mínimo histórico. Apenas 12 de cada 100 vehículos matriculados (un 11,9% del total) en el séptimo mes del año consumían ese combustible.

La tendencia es global. En la primera mitad del año la patronal europea de la automoción, ACEA, advirtió que la cuota de ventas de coches eléctricos había superado a la de los diésel. Mientras que la primera copaba el 15,1% de las ventas de coches nuevos, la segunda era del 13,4%. En España ese sorpasso es imposible que se dé a causa de las dificultades con las que están topando los coches a baterías para despegar, pero el derrumbe del diésel es un hecho. Entre enero y julio se vendieron 76.936 coches diésel, frente a los 27.297 eléctricos puros y los 253.563 de gasolina. Pero la cuestión es cuánto han caído los diésel desde 2019, antes de la pandemia: hoy se vende algo más de un tercio de coches que hace cuatro años.

En la primera década de los años 2000, aupados por las propias administraciones, el coche diésel era un éxito. Llegó a cotas máximas en 2007, con un 1,14 millones de vehículos vendidos, más que el doble que coches de gasolina. Con la larga recesión que siguió todas las ventas se hundieron y no fue hasta 2016 que se volvieron a recuperar las ventas, aunque entonces se situaron en las 651.000 unidades (los de gasolina vendidos fueron entonces 459.000), según datos de Ideauto. En aquellos momentos la crisis del dieselgate, la falsificación de emisiones contaminantes para aguantar las ventas de este tipo de vehículos, ya había estallado en Volkswagen y siguió en otros fabricantes de automoción alemanes. Desde entonces su declive no ha cesado, acompañado por un discurso de las administraciones en que se defendían tipos de vehículos con menos emisiones contaminantes, sobre todo de NOx, las que más afectan en las zonas urbanas.

Los datos de ventas de julio son solo la última señal hasta ahora. Los fabricantes de coches han asumido que sus clientes desconfían de los diésel pese a que, según sus datos, su tecnología de última generación reduce las emisiones de CO₂ respecto a un gasolina y ha igualado las emisiones de NOx. Por poner tres ejemplos de los vehículos más vendidos en España entre enero y julio: de los dos primeros, ni el Dacia Sandero ni el Seat Arona tienen motorizaciones diésel. El Peugeot 2008, sí. Y entre las marcas más vendidas, Toyota solo vende turismos de gasolina. Las marcas han renunciado a que los vehículos más pequeños de su catálogo monte motorización diésel y el hecho de que no hay casi coches eléctricos híbridos con motor diésel también indica que los fabricantes están desechando esa tecnología para los turismos.

Aumento de las ventas

La caída de los diésel se produce en un momento en el que las ventas de vehículos, pese a estar todavía un 27% por debajo de los datos de 2019, se recupera en España. El mercado del motor en España encadena siete meses de aumentos de ventas y la cifra total de coches vendidos, 586.626 turismos y todoterrenos, supera en un 22% la del mismo periodo de un año antes. Las ventas a particulares (239.109 turismos vendidos, un 14,7% más) y a empresas (236.164, un 16,6% más) son las que tiran del mercado en el conjunto de 2023, si bien las firmas de alquiler son las que más vehículos han matriculado respecto al año pasado, un 59% más (111.353).

La nota amarga de julio es la cifra total de ventas, tal y como señala el director de comunicación de Anfac, la patronal de marcas: ““Lo prioritario, más allá de que se vendan más o menos turismos diésel o de cualquier tecnología, es recuperar el mercado para que supere el millón de unidades al año. En julio, las familias compraron 35.000 turismos nuevos, muy lejos de los 58.000 que compraron en el mismo mes de 2019. Sin volumen, es difícil renovar el parque”. Anfac, como Faconauto (que aglutina a los concesionarios) y Ganvam (talleres y vendedores), han reclamado la formación cuanto antes de un gobierno estable que ofrezca tranquilidad a los compradores.

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