El magnate filipino Andrew Tan saca a Bolsa sus oficinas en España para “ampliar” sus propiedades
Emperador Properties, que agrupa las inversiones inmobiliarias españolas del empresario, tocará la campana del BME Growth el próximo lunes
El magnate filipino Andrew Tan, dueño de la mayor destilería mundial de brandi y de un vasto imperio inmobiliario, da nuevos pasos en España. Sus negocios, que comenzaron en 2014 con la compra de una bodega en Jerez, pronto se ampliaron a la compra de edificios y es esta división la que más novedades está dejando últimamente. Primero fue la conversión de Emperador Properties en una socimi (sociedad cotizada de inversión inmobiliaria) y ahora, como consecuencia de e...
El magnate filipino Andrew Tan, dueño de la mayor destilería mundial de brandi y de un vasto imperio inmobiliario, da nuevos pasos en España. Sus negocios, que comenzaron en 2014 con la compra de una bodega en Jerez, pronto se ampliaron a la compra de edificios y es esta división la que más novedades está dejando últimamente. Primero fue la conversión de Emperador Properties en una socimi (sociedad cotizada de inversión inmobiliaria) y ahora, como consecuencia de ese movimiento, su inminente llegada al parqué. La salida a Bolsa ha sido presentada este jueves a la prensa por los directivos españoles de la compañía, quienes han insistido en la importancia de este paso para seguir creciendo. “Queremos ampliar nuestra cartera de activos”, ha asegurado Joan Cortés, uno de los dos consejeros delegados.
Para el aterrizaje en el BME Growth, el antiguo mercado alternativo, se ha fijado un valor que supera los 428,6 millones y un precio por acción de 4,2 euros. La cartera de la socimi la componen los dos principales activos de la compañía: la Torre Emperador Castellana, uno de los cuatro mayores rascacielos de Madrid, y la Torre Diagonal One, en Barcelona. Cada activo pertenece a una sociedad filial de la nueva socimi. El folleto de salida de Bolsa valora el edificio madrileño, con 235 metros de altura y 57 plantas, en algo más de 596 millones. La sede de Telefónica en Barcelona, que tiene 110 metros y 23 plantas, en 148,5 millones. Ambos tienen una ocupación que ronda el 85%, según cifras de la compañía.
Fuera de la operación queda Caleido, otro edificio en el norte del paseo de la Castellana, de la que el grupo Emperador tiene un 50%. Uno de los principales inquilinos, el Instituto de Empresa, demandó al primer propietario, Grupo Villar Mir (que también vendió a Tan la entonces conocida como Torre Espacio), y el conflicto judicial está pendiente de resolución. Cortés ha rechazado que la no incorporación de este activo a la socimi tenga que ver con ese asunto jurídico o con que no sea propiedad completa de Emperador. “Hoy por hoy sacamos las compañías de alquiler de oficinas”, ha asegurado el directivo, “Caleido forma parte de otra división que es la de retail [comercio] y servicios no comerciales”.
El consejero delegado ha evitado comentar si el grupo negocia la compra completa de ese edificio. Sí ha destacado, en cambio, la intención de incorporar más propiedades. La salida a Bolsa, ha argumentado Cortés, abrirá nuevas posibilidades de financiación a la compañía y ayudará a “acometer el plan de crecimiento”. Este se basará en “inmuebles únicos, diferenciales y que responden a unos criterios de arquitectura emblemática”, además de contar con certificados de sostenibilidad. Las adquisiciones que ha llevado a cabo Tan en España hasta ahora, ha detallado el otro consejero delegado, Jorge Domecq, “siempre han sido de no menos de 100 millones”.
Operaciones de envergadura
¿Invita el contexto económico a operaciones de gran envergadura? “Es un tiempo de prudencia y en los próximos meses puede haber oportunidades”, ha señalado Cortés, quien también ha recordado que “hasta ahora la voluntad [de la familia Tan] siempre ha sido mantener el control de sus inversiones”. La salida a Bolsa, de momento y pese a la idea de que contribuya a mejorar las vías de financiación, tendrá poca liquidez: menos de un 5% del valor total, en el que van a estar una veintena de inversores nacionales e internacionales. La socimi no descarta futura ampliaciones de capital o emisiones de deuda. El endeudamiento actual ronda el 45% del valor de sus activos (loan-to-value) y no se esperan vencimientos próximos, según los directivos. La fecha marcada para el inicio de cotización es el próximo lunes, 19 de diciembre, y será el propio Tan quien acuda al parqué madrileño para tocar la campana, según ha informado la compañía.
Para la nueva etapa, también se estrena un consejo de cinco miembros. Los forman los dos consejeros delegados, Domecq y Cortés, junto con tres miembros de la familia Tan. El propio Andrew Tan será presidente; y le acompañarán su esposa, Katherine L. Tan, y su hijo Kevin, máximo ejecutivo de Alliance Global Group, que es la matriz de todos los negocios familiares.
El conglomerado de Tan, de origen chino pero residente en Filipinas desde la adolescencia, incluye numerosas bodegas (la base de sus negocios, y que en España fabrican marcas como Terry o Fundador), además de propiedades inmobiliarias en varios países asiáticos, casinos y hasta franquicias de McDonald’s. Forbes estima su fortuna en 2.400 millones de dólares (unos 2.250 millones de euros, al cambio actual).