Ezentis presenta preconcurso de acreedores ante el riesgo de “insolvencia inminente”
La empresa de ingeniería, que cuenta con 8.000 trabajadores, no ha podido renegociar su deuda tras el rechazo de su rescate por la SEPI
Ezentis ha solicitado este jueves el preconcurso de acreedores ante un juzgado de Sevilla debido a la situación financiera crítica que atraviesa después de que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) rechazara el pasado mes de junio la petición rescate por un importe de 70 millones de euros con cargo al fondo de empresas estratégicas .
La firma de ingeniería ha justificado la petición de preconcurso por “las tensiones de tesorería que viene sufriendo Ezentis en los últimos meses. Se encuent...
Ezentis ha solicitado este jueves el preconcurso de acreedores ante un juzgado de Sevilla debido a la situación financiera crítica que atraviesa después de que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) rechazara el pasado mes de junio la petición rescate por un importe de 70 millones de euros con cargo al fondo de empresas estratégicas .
La firma de ingeniería ha justificado la petición de preconcurso por “las tensiones de tesorería que viene sufriendo Ezentis en los últimos meses. Se encuentra en una situación de insolvencia inminente, que podría devenir actual en las próximas semanas”, según ha comunicado a la CNMV.
La compañía ha informado de que su filial de la empresa en Alemania ha presentado una declaración de insolvencia ante el organismo correspondiente. Asimismo, ha informado que el consejo de administración ha solicitado el preconcurso después de llevar varios meses elaborando un plan de viabilidad que pueda asegurar la continuidad de la empresa y sus filiales, habiendo recibido apoyo tanto por parte de su principal cliente (Telefónica) como de las entidades financieras, “en la medida que las premisas necesarias para la viabilidad de la compañía a día de hoy no se han podido garantizar (especialmente, la entrada relevante de caja)”.
Entre las entidades acreedoras se encuentran los fondos Arcano y Muzinich, así como un grupo de bancos formado por BBVA, Banco Pichincha, Banco Santander, CaixaBank y EBN.
La empresa tiene ahora cuatro meses de plazo para intentar renegociar con los acreedores el pago de su deuda, que ascendía a 157 millones de euros a finales del primer trimestre, de la que ya ha comenzado a impagar a su vencimiento en torno a seis millones. En juego están también en torno a 8.000 empleos, entre fijos y temporales, que forman parte de la plantilla del grupo.
Ezentis registró el año pasado unas pérdidas netas de 139,6 millones de euros, más que triplicando el resultado negativo de 43,1 millones de euros de 2020, debido principalmente a las provisiones realizadas por el deterioro de sus activos en países de Latinoamérica, a resultados no recurrentes y al deterioro de activos por impuestos diferidos. Tras estas pérdidas, entró en patrimonio neto negativo (-163 millones) pero se salvó del preconcurso por la moratoria concursal que aprobó el Gobierno al inicio de la pandemia en marzo de 2020 y que expiró el 30 de junio.
El grupo, especializado en el despliegue, operación y mantenimiento de infraestructuras de telecomunicaciones y energía de grandes multinacionales, tomó la decisión de cesar su actividad en Chile, Perú y México tras haberse frustrado la venta de los activos que tenía en estos países. Ahora quiere centrar su actividad comercial en Europa, donde se concentra la mitad de su cartera actual de 470 millones de euros, y participar en los despliegues de fibra en Alemania y Brasil, como primer proveedor de Telefónica.
El principal accionista de la compañía es el empresario José Elías Navarro, con el 28% del capital, y dueño también de Audax, con la que promovió una fusión que paró la CNMV, y de la cadena de supermercados La Sirena.