La CEOE pide más flexibilidad para amortizar bienes de equipo
El presidente de la CEOE, partidario de que el Gobierno relaje la normativa para facilitar la revitalización de la industria
El pasado miércoles la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) lanzó un sistema de alertas para que las empresas conozcan las convocatorias y licitaciones de los fondos europeos y no pierdan la posibilidad de acceder a las ayudas que el Gobierno canalizará a través de los perte (proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica), los instrumentos ideados para desbloquear los obstáculos burocráticos y fomentar la colaboración público...
El pasado miércoles la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) lanzó un sistema de alertas para que las empresas conozcan las convocatorias y licitaciones de los fondos europeos y no pierdan la posibilidad de acceder a las ayudas que el Gobierno canalizará a través de los perte (proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica), los instrumentos ideados para desbloquear los obstáculos burocráticos y fomentar la colaboración público-privada.
Varios consorcios de empresas han formado grandes expresos que han presentado (o van a presentar) proyectos para movilizar cifras multimillonarias, principalmente centrados en la transformación digital y la transición ecológica. Pero en el entramado empresarial se tiene la sensación de que se está atendiendo mucho a cuestiones como el hidrógeno, los coches eléctricos y otros programas de mucha innovación y poco a los de inversión en bienes de equipo. Eso, en definitiva, supone que se está dejando al margen la industria tradicional y olvidando el principio de que en 2020 tendría que haber llegado al 20% del PIB (no supera el 15%).
Esta situación es la que ha llevado a Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, a plantearse el siguiente paso que dará: pedir al Gobierno que posibilite una norma genérica que permita la libre amortización de las inversiones realizadas en bienes de equipo, independientemente además de que participen o no en algún perte dentro de alguno de los consorcios. De esta forma, a su juicio, se daría un incentivo para que las empresas invirtieran en maquinaria, lo que redundaría en modernizar la industria y en ganar competitividad, así como en fomentar el empleo de calidad. Esta actuación específica beneficiaría especialmente a las pymes, donde se concentra la mayor parte del tejido productivo español.
Para Garamendi el apoyo a la industria es una obsesión, como lo ha subrayado siempre que ha tenido oportunidad, tanto en público como en las diversas conversaciones privadas que mantiene con Pedro Sánchez y algunos miembros del equipo económico del Ejecutivo. Su mensaje es que si el Gobierno quiere apoyar la industria y al empleo no se puede oponer a aceptar esa propuesta de libre amortización, es decir, que las compañías puedan amortizar sus inversiones a la carta, respetando el resto de la normativa.
El líder empresarial guechotarra cuenta con el precedente de 2008, cuando se adoptó una medida similar por parte del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que tuvo consecuencias muy positivas en la inversión de las pymes para afrontar la crisis que depararía en la Gran Recesión. Seguramente recurrirá a su buena relación con el presidente para hacerle llegar su propuesta y convencerle de las ventajas antes de hacerla pública. Es muy posible que no encuentre buena recepción en la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, por la merma que pueden significar los aplazamientos de pagos en las arcas.
La CEOE, que se ha fijado una actividad frenética para no perder ripio en la carrera de los fondos, ya pidió en su día que dos tercios de los fondos europeos se destinen a las empresas. Ahora, mediante este servicio de información, que complementa la plataforma CEOEXEuropa presentada en septiembre, la patronal publicará en su web toda la información de que se disponga y no solo española, sino también de todos los países de la UE. En el caso español se elevan a 72.000 millones, ampliables con créditos hasta 140.000, y dado que la canalización del dinero debe hacerse mediante el principio de concurrencia competitiva, la patronal trata de facilitar la información.
La plataforma se constituye como un vehículo esencial, sobre todo para las pymes. De momento, hasta que comiencen a publicarse los proyectos vinculados a los fondos europeos, incluye las licitaciones del Gobierno, las comunidades autónomas y ayuntamientos, de las que se publican en torno a 75.000 contratos y 18.000 actos referidos a subvenciones. Luego se incluirán también las que correspondan a países europeos y puedan interesar a empresas españolas, “de tal forma que nos convertiremos en el mayor hub de información de fondos públicos que existe en España y en Europa”, según explicó en su presentación el secretario general de la CEOE, José Alberto González Ruiz.