La industria española, la única entre las grandes del euro que destruyó empleo en febrero pese a la mayor actividad
El índice PMI manufacturero de la eurozona escala hasta su máximo en tres años ante las buenas perspectivas por las vacunas
La industria española no comenzó el año con buen pie y la desaceleración de las fábricas se hizo notar en febrero. Pese a que el índice PMI manufacturero muestra un intenso rebote de la producción durante el segundo mes de 2021, la industria española fue la única que perdió empleados entre los principales países de la eurozona, según los datos publicados este lunes por la consultora IHS Markit. El bache laboral contrasta con el fuerte crecimiento de la producción manufacturera nacional en febrero, el mayor desde el pasado mes de julio. Más significativo fue el impulso de la industria en el con...
La industria española no comenzó el año con buen pie y la desaceleración de las fábricas se hizo notar en febrero. Pese a que el índice PMI manufacturero muestra un intenso rebote de la producción durante el segundo mes de 2021, la industria española fue la única que perdió empleados entre los principales países de la eurozona, según los datos publicados este lunes por la consultora IHS Markit. El bache laboral contrasta con el fuerte crecimiento de la producción manufacturera nacional en febrero, el mayor desde el pasado mes de julio. Más significativo fue el impulso de la industria en el conjunto de la zona euro, que experimentó el mes pasado su mayor crecimiento en tres años, aupada por el aumento del consumo familiar y por la venta de material corporativo y maquinarias.
Según datos de la consultora, el empleo manufacturero se situó en España en los 49,2 puntos sobre 100. Este indicador, al igual que el resto de los índices PMI presentados por IHS Markit, responde a lo expresado por los gestores de 3.000 de empresas industriales de la eurozona, que valoran de 0 a 100 la evolución del empleo en un mes concreto. Una cifra por encima de 50 indica un aumento de la plantilla; por debajo, una contracción. Mientras que España se situó en terreno negativo, la media del resto de países analizados —ocho de las economías más representativas de la moneda única— se situó en 51,9. Es decir, que en el resto de socios europeos de relieve aumentó el número de empleados en las fábricas.
Con todo, Paul Smith, director económico de la empresa de análisis, apostilla que la contracción del empleo industrial español en febrero no fue especialmente significativa. “Vale la pena señalar que la evolución negativa del empleo en España fue marginal, justo por debajo de 50″, subraya. Igualmente, el histórico muestra como los puestos de trabajo en las manufacturas españolas, pese a seguir en terreno negativo, han avanzado más de un punto desde noviembre, cuando el indicador se situó en 48,3.
Además del empleo, también destacaron en febrero las ventas industriales, tanto en España como entre sus vecinos. El índice PMI sobre el aumento de las compras de las fábricas (es decir, su previsión de actividad), se situó en España en 52,9, lo que indica que los fabricantes prevén una expansión de la economía a medio plazo. “La confianza en el futuro se fortaleció [en febrero], ya que las empresas [españolas] prevén una fuerte reactivación de la actividad económica una vez que la pandemia esté completamente bajo control”, explica Smith en la nota.
El aumento registrado en febrero, el mayor de las manufacturas españolas en los últimos siete meses, llega después del varapalo de enero, cuando el índice se situó en 49,3 puntos (terreno de contracción) por el freno del consumo, la movilidad y la fabricación debido al incremento de los contagios tras la Navidad, el endurecimiento de las restricciones de movimiento y el temporal Filomena.
Las manufacturas de la eurozona, en máximos de tres años
En todo caso, según la consultora, las fábricas parecen ir calentando motores de cara a una recuperación intensa a medida que avanzan las vacunas. El PMI industrial de los ocho países de la zona euro que evalúa IHS Markit (Alemania, Países Bajos, Austria, Italia, Francia, España, Irlanda y Grecia) se disparó en febrero hasta los 57,9 puntos (54,8 en enero), superando las estimaciones y tocando su máximo de expansión desde 2018. Chris Williamson, analista de IHS Markit, añade que este crecimiento de la actividad de las fábricas se debe a un “renovado acopio de existencias e inversiones en material corporativo y maquinaria, así como una mejora en el consumo”, en previsión de una reactivación de la economía con la llegada de las vacunas.
La industria alemana, la más potente de la Unión, capitanea el crecimiento industrial de la eurozona, y su PMI se situó en febrero en los 60,7 puntos, su máximo en tres años. Le sigue Países Bajos (59,6) y Austria (58,3), mientras que España (52,9) se sitúa en sexta posición (de ocho).
La inflación más alta en casi una década
La firma de análisis destaca en su encuesta de febrero la complicada situación del tráfico comercial internacional. “Las últimas cifras muestran el segundo mayor deterioro de los plazos de entrega desde que los datos estuvieron disponibles por primera vez hace casi 24 años”, se lee en el informe. La principal razón es, según IHS Markit, la creciente demanda internacional de productos unida a las dificultades del transporte debido a la pandemia. Este retraso en los envíos provocó un aumento “drástico” de los precios de los productos y “la inflación alcanzó su tasa más alta registrada en casi una década”.
“En consecuencia, los precios pagados por las materias primas están aumentando a la tasa más rápida en casi una década, lo que apunta a nuevos aumentos en la inflación de los precios al consumidor en los próximos meses, al menos hasta que la oferta y la demanda se equilibren”, escribe Williamson. En España, IHS Markit destaca el aumento del precio de una amplia gama de materias primas, incluidos el papel, los metales (especialmente el acero), los alimentos y los artículos relacionados con el petróleo.