Los olivareros retoman las movilizaciones por la crisis de precios

Decenas de agricultores y vehículos ralentizan la circulación en la A-4 y la N-432, en la provincia de Jaén, y culpan a los especuladores

Tractores en la carretera entre Alcalá y Alcaudete, en la provincia de Jaén.FRANCISCO VICO (Europa Press)

Los olivareros -para ser precisos, los oleicultores del olivar tradicional- aparcaron antes de la declaración del estado de alarma el calendario de movilizaciones que tenían diseñado para protestar por la crisis de precios que vienen sufriendo desde hace al menos dos años. Pero este lunes han dicho basta y, sin esperar a que se levanten las restricciones de la alarma sanitaria, han irrumpido de nuevo con sus vehículos y tractores en las ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los olivareros -para ser precisos, los oleicultores del olivar tradicional- aparcaron antes de la declaración del estado de alarma el calendario de movilizaciones que tenían diseñado para protestar por la crisis de precios que vienen sufriendo desde hace al menos dos años. Pero este lunes han dicho basta y, sin esperar a que se levanten las restricciones de la alarma sanitaria, han irrumpido de nuevo con sus vehículos y tractores en las principales carreteras de acceso a Jaén, la provincia que es la mayor productora mundial de aceite de oliva.

Medio centenar de vehículos y tractores, muchos de ellos portando el lazo verde que simboliza la lucha del sector, se han manifestado en la autovía de Andalucía, A-4, a la altura de La Carolina, según informó la Subdelegación del Gobierno. No han cortado la vía, pero sí han logrado ralentizar la circulación. Posteriormente, se han desplazado hasta la localidad de Vilches, donde se han apostado durante una hora a las puertas de la envasadora de aceite de oliva Coosur, un tiempo en el que no han dejado entrar ni salir camiones. Otra protesta no autorizada ha tenido lugar en la N-432, en Alcalá la Real. Otro medio de centenar de vehículos agrarios ha marchado en caravana hasta el municipio de Alcaudete con la estrecha vigilancia de un buen número de efectivos de la Guardia Civil, que ha impedido la presencia de vehículos de otras provincias al estar prohibida la circulación entre provincias. “Hemos salido a la calle a manifestarnos porque ya no aguantamos más, nos están chupando la sangre y ya no podemos seguir así”, ha señalado a Europa Press Francisco Vico, uno de los manifestantes.

Las principales organizaciones agrarias, que antes del estado de alarma dejaron en suspenso la convocatoria de una marcha hasta Madrid para exigir precios justos para los productores, se han desmarcado de las protestas no autorizadas. No obstante, en las últimas semanas ha ido creciendo el clamor para volver a la lucha olivarera. “El libre mercado de la oferta y la demanda no funciona y en el aceite de oliva sobran especuladores que se aprovechan del esfuerzo de los olivareros para enriquecerse. Y si no, cómo se explica que tengamos menos aceite que la campaña pasada, se haya incrementado el consumo durante el confinamiento [en torno a un 30% por el acopio de aceite en los hogares] y el precio en origen, sin embargo, sea un 13% inferior al del año pasado”, ha señalado Cristóbal Cano, responsable de la Sectorial de Aceite de Oliva de UPA. En las últimas semanas, los olivareros venían recibiendo precios por debajo de los dos euros el kilo, cuando el umbral de rentabilidad se fija en un mínimo de 2,70.

Dentro de este comportamiento del mercado oleícola llama la atención también que las importaciones de aceite de países de fuera de España han sido en abril las más altas de los últimos cinco años. “Resulta vergonzoso que en un momento en el que el mercado está funcionado bien y está aumentado el consumo, nos encontramos que los precios del aceite de oliva en origen se encuentran por debajo de los costes de producción”, ha indicado Juan Luis Ávila, responsable sectorial de Aceite de COAG.

Las organizaciones agrarias apremian al Ministerio de Agricultura a activar las modificaciones en Ley de la Cadena Alimentaria y también a que se les permita mecanismos de autorregulación. “Ahora son más necesarios que nunca para conseguir un equilibrio entre todos los eslabones de la cadena y alcanzar una retribución justa para los olivareros. ¿Qué más tienen que esperar las administraciones para que la modificación de Ley de la Cadena corrija este desmadre y la autorregulación, de manera inmediata, permita diferir disponibilidades en el tiempo?, se preguntó Cristóbal Cano, de UPA.

Europa bendice la marca ‘Jaén’

En medio de una crisis de precios sin precedentes, el olivar tradicional ha recibido un soplo de aire fresco tras publicarse en el Diario Oficial de la Unión Europea la Indicación Geográfica Protegida (IGP) 'Aceite de Jaén’, la primera IGP de aceite de oliva virgen extra en España. Se trata de una figura de protección y una marca para el aceite Jaén (donde la variedad mayoritaria es la Picual) que venía siendo reclamada desde hace más de una década por los olivareros de esta provincia.

Esta IGP convivirá con las tres denominaciones de origen existentes en la provincia jiennense, las de Sierra de Segura, Sierra Mágina y Sierra de Cazorla, y llega para intentar cambiar la inercia en un sector y de una provincia hegemónicas en cuanto a producción (el 40% de la cosecha nacional) pero que, históricamente, ha venido dejado escapar el valor añadido del oro líquido vendiendo gran parte de la cosecha a granel a otros países que luego comercializaban ese aceite con marcha propia.

Para el catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados Manuel Parras, presidente de la Federación de Productores que ha impulsado la IGP, el fin último de este instrumento es posicionar bien los aceites de oliva virgen extra tanto entre los consumidores como en los agentes de la cadena de valor. Y ello, a través de “una diferenciación basada tanto en la calidad como en el origen”.

Más información

Archivado En