El gigante sudafricano Naspers: de la segregación racial al dominio de Internet

La empresa, que financió el ‘apartheid’, sacará a Bolsa en Holanda sus participadas en una operación de 100.000 millones de euros

Sede de Naspers en Ciudad del Cabo (Sudáfrica).Paul Gregg (alamy)

De pasado tenebroso —financió al régimen que aplicó la segregación racial en Sudáfrica—, Naspers es un coloso digital que ha elegido la Bolsa de Ámsterdam como pista de aterrizaje para su cartera de participadas. Concentrará para ello sus inversiones tecnológicas que se esparcen por medio mundo en una nueva empresa, denominada provisionalmente NewCo. Las cifras que se manejan para esta operación, que se concretará durante la segunda mitad de 2019, habl...

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De pasado tenebroso —financió al régimen que aplicó la segregación racial en Sudáfrica—, Naspers es un coloso digital que ha elegido la Bolsa de Ámsterdam como pista de aterrizaje para su cartera de participadas. Concentrará para ello sus inversiones tecnológicas que se esparcen por medio mundo en una nueva empresa, denominada provisionalmente NewCo. Las cifras que se manejan para esta operación, que se concretará durante la segunda mitad de 2019, hablan de una compañía valorada en unos 100.000 millones de euros, lo que la convertiría en el mayor grupo cotizado europeo de Internet, y en la tercera compañía más valiosa del parqué holandés tras gigantes como Shell y Unilever.

En la carta de presentación de Naspers para atraer inversores se define como “un grupo que opera en Internet a escala global y también uno de los mayores inversores mundiales en tecnología”. El plan inicial prevé que la matriz conserve el 75% de las acciones del holding de participadas y solo venda el 25% de capital a grandes fondos. La estrella de la corona de Naspers es Tencent. En una mezcla de golpe de suerte y olfato para los negocios, en 2001 invirtió 31 millones de dólares en el 46,5% de las acciones de la firma china de tecnología, entonces una desconocida. Actualmente, Naspers posee el 31% de Tencent, un paquete cuyo valor de mercado ronda los 130.000 millones de dólares.

Naspers, en su origen un grupo editor de periódicos es la mayor empresa de la Bolsa de Johannesburgo con una capitalización cercana a los 105.000 millones de euros, es decir, el mercado está valorando todo el grupo por debajo de lo que vale por sí sola su inversión en Tencent. Los expertos creen que uno de los objetivos de sacar a Bolsa sus participadas es precisamente una mejor valoración de sus negocios por parte del mercado. “La operación supone una oportunidad atractiva para que los inversores internacionales en tecnología tengan acceso a una cartera única de activos internacionales”, ha comentado el consejero delegado de Naspers, Bob van Dijk.

El buen resultado de la apuesta por Tencent llevó a Naspers del negocio editorial tradicional a la tecnología hasta transformar por completo la fisonomía del grupo, como demuestra el hecho de que el 79% de sus ingresos procedan ya del área de Internet. “En la elección [de sacar a Bolsa sus participadas en Holanda] ha podido influir también el hecho de que algunos inversores prefieren no entrar en el mercado sudafricano por razones políticas y económicas”, apunta Wim Zwanenburg, de la firma holandesa de gestión de activos Stroeve & Lemberger.

Naspers representa el 25% del valor total de la Bolsa sudafricana, una cifra muy elevada que genera algunos problemas de liquidez para sus acciones. “En la última década nos hemos transformado en la firma más importante del mercado local”, asegura Van Dijk en el comunicado donde explica el salto a Ámsterdam. Para evitar riesgos, ante esta posición dominante, había llegado el momento de “reducir nuestro peso y alcanzar la capitalización que merecemos, ofreciendo nuevas oportunidades a inversores internacionales”, añade. Ello no significa que vayan a descuidar el negocio en Sudáfrica. “Hay grandes oportunidades y somos uno de los mayores inversores en tecnología del país”. Como NewCo, trabajan sobre todo en mercados emergentes de Europa del Este, India, Rusia y China, buscando nuevas oportunidades y reduciendo así la dependencia de Tencent. Con unos 30.000 empleados y subsidiarias en 120 países, la matriz tiene un año fiscal irregular que finaliza en marzo. En el ejercicio 2017-2018, los ingresos crecieron un 38% hasta 20.100 millones de dólares, y el beneficio por operaciones fue de 3.400 millones, un 52% más.

Un grupo centenario

1914. El origen de Naspers se remonta a 1914 cuando se creó un grupo editorial que publicaba periódicos como De Burger dirigidos a la comunidad de origen holandés que vivía en Sudáfrica.

1985. Durante siete décadas la compañía fue ampliando sus actividades como editora de diferentes publicaciones. En 1985 dio el salto al negocio audiovisual con el lanzamiento de Mnet, su primer canal de televisión de pago.

2001. Con la llegada del nuevo siglo Naspers realiza una operación que transformará por completo su modelo de negocio, virándolo hacia el mundo digital: hace su primera inversión en Tencent.

2019. El equipo gestor decide sacar a Bolsa en Holanda su cartera de participadas. El objetivo es que el mercado valore de forma más adecuada sus numerosas inversiones en el ámbito de Internet.

Otras apuestas

Además de a Tencent, los tentáculos de Naspers llegan a otras compañías digitales. Entre sus inversiones se encuentran una participación del 22% en Delivery Hero, la firma alemana de servicio de comida a domicilio, presente en más de 40 países de Europa, Oriente Medio, Asia y América Latina. Su red de intereses también se extiende a los mercados emergentes, donde está presente en el accionariado de algunas de las marcas de Internet más reconocidas en el ámbito local como la red social y de networking rusa mail.ru, la agencia de viajes online india MakeMyTrip y el grupo brasileño de alimentación iFood.

La mudanza a Holanda no será traumática porque el grupo tiene oficinas en Ciudad del Cabo y Hong Kong, pero también en Hoof­­dorp, localidad situada a 32 kilómetros de Ámsterdam. Muy bien conectada con la red de transporte público, allí trabajan 200 empleados, y el plan es llevar luego la sede al distrito financiero de la capital (Zuidas). “Para los inversores, que Naspers escoja la capital de los Países Bajos refuerza su imagen como centro financiero e implica mayor capacidad de elección. Es un tipo de compañía que no habíamos visto hasta la fecha, y ello revertirá en una mayor liquidez en la Bolsa. Es un polo de atracción”, señalan portavoces de NN Investment Partners, una gestora de activos con sede en La Haya y oficinas en 15 países. Sus expertos añaden que cotizar en Europa supone acceder a una fuente de financiación mayor, “y es también un ejemplo para otras firmas, como ocurrió en 2018 con Adyen”.

Los orígenes de Naspers se remontan a 1914, con la fundación en Sudáfrica de la empresa de diarios y revistas De Nasionale Pers, cuyos socios afrikáneres [el grupo de origen étnico neerlandés] publicaron luego el rotativo De Burger (El ciudadano). Su apoyo económico posterior al régimen de apartheid y al Partido Nacional —en el poder entre 1948 y 1994— llevó a 127 de sus periodistas a pedir perdón en 1997 a título personal por la defensa de la segregación racial. La Comisión para la Verdad y la Reconciliación reclamó a Naspers que explicara su papel entre 1960 y 1994, pero la firma rechazó la solicitud.

En 2015, Esmaré Weideman, directora general de Media 24, la rama de publicaciones digitales, se disculpó por lo sucedido. “Reconocemos nuestra complicidad en un régimen imposible de defender desde el punto de vista moral y lo ocurrido en nuestras redacciones y juntas directivas. Fueron décadas de sufrimiento y humillación y por eso rogamos perdón”. En la nota recogida por la propia News24, Weideman recordó que Conrad Sidego, el primer reportero negro de la casa, “no podía usar los baños de los demás empleados [blancos]”.

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