Los beneficios de Puig suben un 19%

La empresa ocupa ahora la séptima plaza en el ranking mundial del sector de perfumería selectiva

Campos de lavanda, célebre en la elaboración de perfumes en Grasse, en la Provenza (Francia).AGE FOTOSTOCK

Los resultados de Puig en 2011 casi resultan monótonos de tan parecida como es la pauta ascendente respecto a la del año anterior. El beneficio neto atribuido de la compañía aumenta un 19% hasta alcanzar los 155 millones de euros mientras en 2010 esa la subida fue del 22%. Por su parte, el EBIT pasa de los 184 millones de euros del ejercicio anterior a los 210 de este y representa un 15,7% de los ingresos netos. Las ventas se incrementaron un 12% y superan los 1.300 millones de euros. El año pasado se rebasó la frontera de los 1.200.

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Los resultados de Puig en 2011 casi resultan monótonos de tan parecida como es la pauta ascendente respecto a la del año anterior. El beneficio neto atribuido de la compañía aumenta un 19% hasta alcanzar los 155 millones de euros mientras en 2010 esa la subida fue del 22%. Por su parte, el EBIT pasa de los 184 millones de euros del ejercicio anterior a los 210 de este y representa un 15,7% de los ingresos netos. Las ventas se incrementaron un 12% y superan los 1.300 millones de euros. El año pasado se rebasó la frontera de los 1.200.

Con estos números, Puig consolida la estrategia emprendida hace un lustro: incrementar su cuota de mercado para situarse entre los líderes mundiales del sector de perfumería selectiva. La empresa ocupa ahora la séptima plaza en el ranking mundial de ese negocio y en ese intervalo ha capturado el 25% de su crecimiento. Según sus cálculos, hoy controla el 7,6% del mercado global y más del 80% de su negocio se genera fuera de España. En 2007, ese porcentaje se situaba en el 64%. Puig produce las fragancias de Valentino, Prada o Comme des Garçons a través de un acuerdo de licencia y es propietario de la moda y perfumería de Nina Ricci, Carolina Herrera y Paco Rabanne.

La empresa no se pronuncia sobre su presunto interés en comprar Valentino

El otro pilar estratégico de la compañía catalana es su transformación en un híbrido de cosmética y moda. Se trata de un modelo atípico y persigue, sobre todo, controlar las marcas cuyas fragancias produce. En esa línea se enmarca la compra del 65% de Jean Paul Gaultier en 2011, aunque sus perfumes están en manos de BPI hasta 2016. Pero más allá de su influencia en el negocio cosmético, la división de moda busca ser rentable por sí misma. En 2011, sus ventas se han incrementado un 31% con Ricci y Herrera como principales agentes de crecimiento. El año pasado, Puig fichó al ejecutivo Ralph Toledano para dirigir Gaultier y Ricci en un gesto que prueba su apuesta por esta industria.

La compañía no se pronuncia sobre su presunto interés en comprar Valentino u otras adquisiciones, pero sí afirma “que mantiene un balance saneado con excedente de tesorería que le permite afrontar proyectos de crecimiento futuro”. Las ventas en el primer trimestre de 2012 subieron un 20% respecto al anterior y la compañía esperar cerrar este año con ventas de 1.400 millones de euros.

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