Un aguacero colapsa parte de la red viaria en Barcelona

Llegó la tormenta y se hizo el caos. El área de Barcelona sufrió las consecuencias de las fuertes y repentinas lluvias registradas ayer por la tarde, que dejaron colas kilométricas en las principales vías de entrada a la ciudad y obligaron a interrumpir dos líneas del servicio del metro. La gran cantidad de agua caída en un breve espacio de tiempo causó estragos y los bomberos atendieron más de 100 salidas en apenas unas horas.

La mayor parte del aguacero se concentró en apenas 10 minutos y obligó a cortar la B-20 a la altura de Santa Coloma de Gramenet en ambos sentidos de la circulaci...

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Llegó la tormenta y se hizo el caos. El área de Barcelona sufrió las consecuencias de las fuertes y repentinas lluvias registradas ayer por la tarde, que dejaron colas kilométricas en las principales vías de entrada a la ciudad y obligaron a interrumpir dos líneas del servicio del metro. La gran cantidad de agua caída en un breve espacio de tiempo causó estragos y los bomberos atendieron más de 100 salidas en apenas unas horas.

La mayor parte del aguacero se concentró en apenas 10 minutos y obligó a cortar la B-20 a la altura de Santa Coloma de Gramenet en ambos sentidos de la circulación. En parte de la C-58 también se tuvo que restringir la circulación al tráfico por la acumulación de agua entre Terrassa y Ripollet. Esta medida provocó graves retenciones en las dos rondas, la Litoral y la de Dalt. El Servicio Catalán de Tráfico recomendó prudencia a los conductores, que también sufrieron colas de hasta cuatro kilómetros en la C-17. En la C-31, las retenciones alcanzaron los nueve kilómetros entre Barcelona y Montgat. Lo mismo ocurrió en la principal arteria viaria catalana, la AP-7, sobre todo entre Sant Cugat y Mollet.

Metro cerrado

Transportes Metropolitanos de Barcelona suspendió la circulación de las líneas 9 y 10 del metro a partir de las 19.46 horas a causa de las fuertes lluvias, que provocaron filtraciones de agua en distintos puntos del trazado. Dada la brevedad del aguacero, el servicio pudo reabrirse poco después en la línea 10 y en parte de la 9. La entrada de más cantidad de agua en la zona de vías, sin embargo, obligó a suspender totalmente el servicio a las ocho de la tarde. La compañía puso en marcha un servicio de autobús alternativo que entró en funcionamiento media hora después para cubrir los tramos entre la Sagrera y Can Zam (Santa Coloma de Gramenet) y hasta la estación de Gorg (Badalona).

Protección Civil activó la fase de alerta del plan por inundaciones (Inuncat) y lo desativó pasadas las 23.00 horas. La mayoría del centenar de incidencias atendidas por los bomberos se registró en el Barcelonès y el Vallès Occidental. No hubo incidencias graves, salvo en Badalona, donde el techo de un gimnasio se vino abajo parcialmente por la lluvia. Una mujer de 63 años que estaba dentro del local sufrió una crisis de ansiedad y fue trasladada al hospital Espíritu Santo. El accidente se produjo las 19.45, cuando el aguacero tomó mayor intensidad.

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