Debate a tres bandas en dos bandos

Cuando todavía faltan dos meses y medio para que empiece oficialmente la campaña electoral, los candidatos para Sevilla de PSOE, PP e IU, los tres partidos con representación en el Ayuntamiento, ya se enfrentaron ayer a su primer debate televisado. La cita fue en Giralda TV, la televisión municipal, donde Juan Espadas (PSOE), Juan Ignacio Zoido (PP) y Antonio Rodrigo Torrijos (IU) debatieron en directo durante hora y media (de nueve a diez y media de la noche) sobre el modelo de ciudad con el que cada uno se presentará a los comicios del 22 de mayo.

La cita estuvo dividida en tres bloqu...

Cuando todavía faltan dos meses y medio para que empiece oficialmente la campaña electoral, los candidatos para Sevilla de PSOE, PP e IU, los tres partidos con representación en el Ayuntamiento, ya se enfrentaron ayer a su primer debate televisado. La cita fue en Giralda TV, la televisión municipal, donde Juan Espadas (PSOE), Juan Ignacio Zoido (PP) y Antonio Rodrigo Torrijos (IU) debatieron en directo durante hora y media (de nueve a diez y media de la noche) sobre el modelo de ciudad con el que cada uno se presentará a los comicios del 22 de mayo.

La cita estuvo dividida en tres bloques (economía, empleo e inversiones; convivencia, participación y bienestar social; y movilidad y proyecto de ciudad) y dos bandos: los candidatos de PSOE e IU compartieron enemigo a batir, el candidato del PP, en el que centraron las críticas y las dudas sobre lo que haría si llega a la alcaldía. Zoido solo ratificó que derogará el plan que limita el acceso en coche al centro, aunque aseguró que planteará nuevas "medidas restrictivas" cuando "se adapten los servicios". No explicó qué medidas ni qué servicios.

Cada uno jugó su papel: Espadas buscó el equilibrio entre lo más positivo del legado que le deja el actual gobierno socialista y su propio proyecto. "Aquí se habla de cómo afrontar el futuro. El pasado lo conocemos todos", le espetó a Zoido, empeñado en la crítica al gobierno que ahora acaba. Torrijos supo reivindicar el papel de IU en los dos últimos mandatos y Zoido se erigió en el único futuro alcalde "capaz de resolver los problemas, en vez de crearlos".