La policía rastrea Córcega con la madre de las mellizas suizas

Nuevas pistas siguen el itinerario del crucero familiar

La policía francesa, acompañada por investigadores suizos llegados este fin de semana, rastrea Córcega en busca de cualquier elemento que permita dar con el paradero de Alessia y Livia Schepp, las mellizas suizas de seis años secuestradas hace dos semanas por su padre antes de que este se suicidara el pasado 3 de febrero. La madre de las niñas, la italiana Irina Lucini, llegó ayer a la isla donde viajó Matthias Schepp, el padre, con las niñas para ayudar ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La policía francesa, acompañada por investigadores suizos llegados este fin de semana, rastrea Córcega en busca de cualquier elemento que permita dar con el paradero de Alessia y Livia Schepp, las mellizas suizas de seis años secuestradas hace dos semanas por su padre antes de que este se suicidara el pasado 3 de febrero. La madre de las niñas, la italiana Irina Lucini, llegó ayer a la isla donde viajó Matthias Schepp, el padre, con las niñas para ayudar en la búsqueda. Pese a que este dejó por escrito haber matado a las pequeñas , la familia se niega a perder la esperanza y reiteró ayer su llamamiento al testigo que dijo haber visto a las niñas en la localidad italiana de Ascoli Piceno.

Los investigadores creen que el padre pudo repetir el viaje por nostalgia
Más información

"Se lo suplico, llame a la policía, incluso en caso de duda o si los datos le parecen ínfimos", declaró Lucini a la prensa desde el aeropuerto de la capital corsa, donde llegó por la mañana acompañada por su hermano. La madre de las niñas desaparecidas el 30 de enero en Saint Sulpice, en el cantón suizo de Vaud, viajó hasta allí a petición de los investigadores, donde estuvo sobrevolando la isla.

El rastreo se centra en el itinerario de un crucero efectuado por la familia en 2008, antes de que los padres se separaran, hace unos meses, por lo que la policía baraja la posibilidad de que Schepp hubiera hecho un recorrido similar, empujado por la nostalgia de aquel viaje.

Los investigadores también siguen la pista de los nuevos testimonios recibidos desde el viernes que aseguran haber visto a las pequeñas en diferentes puntos de la isla. "Estamos considerando cada testimonio, todos los llamamientos están centralizados, las informaciones contrastadas y los investigadores se desplazan para entrevistar a las personas" si los elementos son considerados creíbles, indicó ayer a la agencia France Presse una fuente cercana a la investigación.

Así, un ciudadano de unos 60 años recuerda haber aparcado el 1 de febrero junto a un coche "sucio y lleno de barro" con matrícula suiza en el garaje de la capitanía de Macinaggio, uno de los pueblos visitados en el viaje familiar de 2008. El testigo reconoció al volante a Schepp, acompañado de una mujer rubia, pero no vio a nadie en la parte trasera. El sábado, otra mujer aseguró al "95%" haber visto a las niñas y reconoció "al 90" al padre junto a una mujer rubia, por lo que la policía no descarta que haya contado con una cómplice.

Irina Lucini, la madre de las niñas desaparecidas, ayer en la isla de Córcega.AFP