650.000 afectados y un enorme daño económico
Entre los 1.700 vuelos que no pudieron partir el viernes y los 2.609 cancelados ayer, son ya 4.309 los aviones que se quedaron en tierra, con los que los afectados ascienden a unos 650.000, estimación basada a razón de una media de 150 pasajeros por aeronave. Tanto el presidente de AENA, Juan Ignacio Lema, con las compañías aéreas han estado advirtiendo a los viajeros que no acudieron a los aeropuertos hasta ponerse en contacto con sus aerolíneas y supiesen cuándo iba a salir su vuelo.
Según la normativa europea, las aerolíneas deben hacerse cargo de los clientes que no puedan volar: bu...
Entre los 1.700 vuelos que no pudieron partir el viernes y los 2.609 cancelados ayer, son ya 4.309 los aviones que se quedaron en tierra, con los que los afectados ascienden a unos 650.000, estimación basada a razón de una media de 150 pasajeros por aeronave. Tanto el presidente de AENA, Juan Ignacio Lema, con las compañías aéreas han estado advirtiendo a los viajeros que no acudieron a los aeropuertos hasta ponerse en contacto con sus aerolíneas y supiesen cuándo iba a salir su vuelo.
Según la normativa europea, las aerolíneas deben hacerse cargo de los clientes que no puedan volar: buscarles un medio de transporte alternativo, cambiarles el billete o devolverles el dinero. Y, además, en el tiempo que quedan varados en un aeropuerto fuera de su ciudad de procedencia, deben hacerse cargo de su alojamiento y manutención.
Todo se traduce en pérdidas millonarias. Para el transporte aéreo, pero también para la industria turística, que se quedará sin recibir a buena parte de los visitantes previstos. "Hay unas consecuencias económicas muy importantes y alguien va a tener que pagarlas", dijo el secretario general de Turismo y Comercio Interior, Joan Mesquida.
Pérdidas
- Entre el viernes por la tarde, cuando comenzó el conflicto, y ayer a las nueve de la noche se habían dejado de operar 4.309 vuelos previstos, lo que afecta a unos 650.000 pasajeros, calculando 150 por vuelo.
- Las aerolíneas calculan que dejarán de ingresar entre 60 y 80 millones de euros diarios por el cierre del espacio aéreo español, según una estimación de fuentes del sector.