Mas achaca la decisión de Montilla a estrategia electoral

Las encuestas explican muchas cosas. Artur Mas, candidato de Convergència i Unió (CiU), achacó ayer a los resultados de los sondeos la decisión de José Montilla de no presentarse por tercera vez a las elecciones. "Va flojito [en los sondeos] y supongo que todo obedece a una estrategia electoral", afirmó tras recibir el calor de políticos de la familia internacional de liberales y democristianos en la que se encuadra CiU, además de varios ex presos políticos cubanos.

Mas no quiso valorar si Montilla está preparando su sucesión o no -"máximo respeto", dijo-, pero subrayó, en cualquier cas...

Las encuestas explican muchas cosas. Artur Mas, candidato de Convergència i Unió (CiU), achacó ayer a los resultados de los sondeos la decisión de José Montilla de no presentarse por tercera vez a las elecciones. "Va flojito [en los sondeos] y supongo que todo obedece a una estrategia electoral", afirmó tras recibir el calor de políticos de la familia internacional de liberales y democristianos en la que se encuadra CiU, además de varios ex presos políticos cubanos.

Mas no quiso valorar si Montilla está preparando su sucesión o no -"máximo respeto", dijo-, pero subrayó, en cualquier caso, que su rival socialista concurre a estas elecciones porque quiere ser otra vez presidente. "Que nadie se despiste", dijo en un mensaje a su electorado en su cruzada para no perder por el camino ni un voto. Y, en esa línea, expresó su certeza, en TV-3, de que Montilla, por mucho que lo niegue, si puede, reeditará el tripartito: "¿Y por qué iba a renunciar? Lo más hábil e inteligente es que si puede lo repita. Es una cuestión de coherencia. Y yo eso lo tendría que respetar", valoró.

Tras fracasar hace cuatro años con una campaña agresiva, CiU ha dado una vuelta de tuerca y la de ahora está basada solo en propuestas y en mensajes positivos. Sus sondeos apuntan a que el domingo la participación rondará el 51%. Ese porcentaje abriría las puertas del Parlamento a los partidos pequeños y alejaría a CiU de una mayoría holgada. Pero si la afluencia a las urnas sube al 55%, estará a un paso de la mayoría absoluta. Fuentes de CiU creen que la batalla está ahí y acusaron al PSC de hacer una campaña de bajo nivel para desmovilizar al electorado con temas como el vídeo del orgasmo de la ciudadana que vota o el caso Palau.