Urkullu atribuye a la 'atomización' del nacionalismo la pérdida del Gobierno

Pide a los 'abertzales' articular una "misma apuesta de país" en torno al PNV

El PNV sigue dándole vueltas a la pérdida de Ajuria Enea. En el primer Aberri Eguna que celebran en la oposición en 30 años de democracia, su presidente Íñigo Urkullu hizo incluso autocrítica al reconocer que ellos también han cometido algunos errores que han propiciado la división del nacionalismo y en consecuencia han ayudado a construir ese escenario de progresiva pérdida de poder político.

De tener el control en todas las instituciones vascas han pasado en tres décadas a ceder los Ayuntamientos de San Sebastián y Vitoria, y el Gobierno vasco. Ahora gobiernan en la Diputación de Álav...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El PNV sigue dándole vueltas a la pérdida de Ajuria Enea. En el primer Aberri Eguna que celebran en la oposición en 30 años de democracia, su presidente Íñigo Urkullu hizo incluso autocrítica al reconocer que ellos también han cometido algunos errores que han propiciado la división del nacionalismo y en consecuencia han ayudado a construir ese escenario de progresiva pérdida de poder político.

De tener el control en todas las instituciones vascas han pasado en tres décadas a ceder los Ayuntamientos de San Sebastián y Vitoria, y el Gobierno vasco. Ahora gobiernan en la Diputación de Álava después de dos legislaturas de Gobierno del PP, pero de milagro, y no tanto debido a méritos propios sino a la animadversión manifiesta en la provincia entre los responsables del PSE y del PP que no fueron capaces de llegar a un acuerdo en 2007. Pero todavía puede ser peor. Los presuntos casos de corrupción que acechan al partido en Álava y en Guipúzcoa pueden complicar aun más ese escenario en vísperas de las elecciones municipales y forales del próximo año.

"El pacto de hierro PSE-PP busca imponer la España del Estado-nación"
Más información

Por esa razón el lema del Aberri Eguna 2010 con el que se presentó el PNV a sus bases fue Construyendo Euskadi, Euskadi Eraikitzen, un lema con el que quieren reflejar que su principal reto es recuperar el camino perdido. "La atomización sin precedentes que vive actualmente el nacionalismo vasco ha abierto el camino para el éxito de la estrategia PSE-PP", reconoció el presidente del PNV, Íñigo Urkullu. Una atomización cuyo mejor reflejo es la fotografía del Aberri Eguna, con hasta cuatro actos diferentes de las distintas formaciones abertzales.

En ese contexto de división de la familia nacionalista, el presidente del PNV, flanqueado por los principales cargos públicos de su partido, incluido el ex lehendakari Juan José Ibarretxe, apeló a la capacidad de su formación para reinventar una alternativa de abertzales. "Demostremos que tenemos la capacidad de integrar en una misma apuesta de país a las personas y sensibilidades abertzales y demócratas, superando los errores que en el pasado pudimos cometer", dijo en la Plaza Nueva de Bilbao ante un millar de afiliados y simpatizantes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Fue una alusión a la dolorosa escisión del PNV de 1986 de la que nació EA y a la reciente escisión de ese partido en Hamaikabat, o incluso al pacto de Lizarra, que debilitó al nacionalismo, dinamitó los puentes entre nacionalistas y no nacionalistas y lejos de facilitar el fin de ETA reforzó a los terroristas.

"Ahora, todos aquellos que crean que Euskadi es una nación, y quienes crean en un futuro de bienestar, desarrollo y libertad, encontrarán en el PNV su camino, nos encontrarán para hacer el camino juntos", invitó a Hamaikabat, Aralar, EA, y a quienes en la izquierda abertzale estén cansados ya de la dependencia de ETA.

Una alternativa con la que hacer frente al "pacto de hierro" que han firmado socialistas y populares y que sostiene en el Gobierno vasco al ejecutivo de Patxi López. "Ese pacto busca imponer la España de Estado-Nación único y uniforme", dijo el presidente del PNV, en la única intervención que se produjo en el acto político. "El problema que tienen es que Euskadi sigue siendo Euskadi y la sociedad vasca sigue siendo diferente", advirtió el presidente nacionalista.

El PNV estima que ha llegado el momento de reaccionar y recuperar el Gobierno porque "Euskadi nos necesita y nos reclama". En medio de los aplausos de su partido ratificó que "ésta es ahora nuestra tarea" y afirmó que no se van a "arrugar ante los Zapatero y Rajoy, o sus delegados López y Basagoiti".

Íñigo Urkullu, presidente del EBB, durante la celebración del Aberri Eguna ayer en la Plaza Nueva del Casco Viejo de Bilbao.LUIS ALBERTO GARCÍA

Sobre la firma

Archivado En