La muerte de Orlando Zapata
Resulta muy triste, efectivamente, que la muerte trágica de Orlando Zapata, preso de conciencia para AI, muerto tras 85 días de huelga de hambre, no haya despertado a muchas conciencias de la izquierda. La dignidad de los que luchan contra la injusticia en todas sus formas lo reclama seriamente.
No se puede ni se debe apartar la vista ante el desvalimiento en que se encuentran tantos ciudadanos y presos cubanos, cuyo único delito es tener la valentía de manifestar desacuerdos con su Gobierno.
Vi a Raúl Castro en televisión respondiendo a los periodistas brasileños, que le pregunt...
Resulta muy triste, efectivamente, que la muerte trágica de Orlando Zapata, preso de conciencia para AI, muerto tras 85 días de huelga de hambre, no haya despertado a muchas conciencias de la izquierda. La dignidad de los que luchan contra la injusticia en todas sus formas lo reclama seriamente.
No se puede ni se debe apartar la vista ante el desvalimiento en que se encuentran tantos ciudadanos y presos cubanos, cuyo único delito es tener la valentía de manifestar desacuerdos con su Gobierno.
Vi a Raúl Castro en televisión respondiendo a los periodistas brasileños, que le preguntaron sobre Zapata. Al contestar se hizo el simpático con mucho cinismo y contestó como le dio la gana, desviando la atención hacia Guantánamo: allí sí se tortura, pero no en Cuba.
En estos días hay cinco cubanos más en huelga de hambre -uno también de sed, desde hace cinco días-, hago un llamamiento para que tratemos de hacerles llegar nuestro amparo y apoyo por todos los medios.