La oposición exige a Saura y Baltasar que dimitan por el incendio de Horta
El Gobierno pide perdón por su error al sostener que el fuego fue accidental
La porción de Gobierno catalán que lleva el sello de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV-EUiA) sufrió ayer un ataque sin concesiones en el Parlament. Todos los grupos de la oposición (CiU, el PP y Ciutadans) exigieron la dimisión de los dos consejeros ecosocialistas, Francesc Baltasar y Joan Saura, por su gestión del incendio de Horta de Sant Joan que en julio se cobró la vida de cinco bomberos. En un debate bronco y viscoso (por la mezcla de argumentos técnicos y políticos), la oposición acusó al Ejecutivo de mentir y ocultar información sobre la investigación de la tragedia.
El titula...
La porción de Gobierno catalán que lleva el sello de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV-EUiA) sufrió ayer un ataque sin concesiones en el Parlament. Todos los grupos de la oposición (CiU, el PP y Ciutadans) exigieron la dimisión de los dos consejeros ecosocialistas, Francesc Baltasar y Joan Saura, por su gestión del incendio de Horta de Sant Joan que en julio se cobró la vida de cinco bomberos. En un debate bronco y viscoso (por la mezcla de argumentos técnicos y políticos), la oposición acusó al Ejecutivo de mentir y ocultar información sobre la investigación de la tragedia.
El titular de Medio Ambiente pidió disculpas públicamente por haberse equivocado al sostener, pocos días después del incendio, que la causa había sido accidental. Basándose en un informe de los agentes rurales, Baltasar anunció que el impacto de un rayo en un pino desencadenó el incendio mortal. "La ubicación errónea del punto de inicio llevó a conclusiones incorrectas", sostuvo. La hipótesis, en efecto, ha resultado ser falsa. A petición de la juez de Gandesa que investiga el caso, los Mossos descubrieron que el fuego fue intencionado y hace unos días detuvieron a dos jóvenes como presuntos responsables.
Saura anuncia que todos los bomberos llevarán un dispositivo GPS
Hubo, pues, un error. Pero no mentiras. Ése fue el argumento al que se aferraron con firmeza Baltasar y Saura en su comparecencia, que se alargó casi tres horas. Pero la disculpa a los ciudadanos no aplacó a la oposición. "Al final, la policía nos ha dado la razón", espetó el convergente Xavier Pallarès, que acusó a Baltasar de "imprudente" y de actuar "de forma precipitada" por defender con seguridad una tesis que se ha revelado falsa. Pallarès acusó al Gobierno de "intimidar" a quienes, como él, defendieron otras hipótesis desde el primer minuto.
El PP y Ciutadans atacaron otro flanco: las supuestas omisiones de información por parte del Ejecutivo. Según el popular Rafael Luna, existen "lagunas" en el informe que los bomberos entregaron a la juez, cuya intervención "ha sido clave para llegar a la verdad". Luna atribuyó los recientes cambios en la cúpula de los bomberos (Joan Rovira ha sustituido a Antoni Rifà como jefe del cuerpo) a una purga por la "descoordinación en el operativo". Albert Rivera, de Ciutadans, aludió al informe de meteorología que, semanas después del suceso, echaba por tierra la hipótesis del rayo.
Los consejeros aseguraron que ofrecieron la información "disponible en cada momento" y que no pudieron explicarlo todo porque el caso estaba bajo secreto de sumario. "¿Acaso quieren que cometa una ilegalidad?", dijo a los diputados Saura, especialmente irritado por las acusaciones. "Esta instrumentalización me repugna profundamente".
Las críticas de la oposición se centraron en la supuesta ausencia de mandos después de que los bomberos se vieran atrapados en una bola de fuego. "No había nadie en la hora fatídica en el centro de mando avanzado", dijo Pallarès. Saura lo desmintió y aseguró que las comunicaciones funcionaron "minuto a minuto". A juicio del consejero, el desenlace fatal no fue fruto de la presunta descoordinación, sino que obedeció a muchas causas: la excepcionalidad de las rachas de viento, la interrupción de los medios aéreos, la velocidad de las reproducciones del fuego y el rescate de los miembros de la Brif, la brigada del Ministerio de Medio Ambiente. Ellos pidieron retirarse y fueron rescatados. Los miembros del GRAF (la unidad de élite en extinción) decidieron quedarse porque se sintieron seguros, aunque más tarde lanzaron mensajes que no pudieron ser atendidos. El siniestro, según Saura, fue "imprevisible e inevitable", algo en lo que CiU no está de acuerdo.
Los socios de gobierno, PSC y ERC, defendieron a los consejeros sin apenas matices críticos. Pese a todo, Baltasar y Saura lanzaron propuestas de mejora. Los agentes rurales reducirán el tiempo de llegada al incendio y mejorarán el sistema para recoger datos relevantes. Y los bomberos (todos ellos, no sólo el 20% como hasta ahora) llevarán GPS para que puedan ser localizados al instante.