Rajoy contradice a Feijóo y defiende que haya más de una caja en Galicia

A la pregunta de si es partidario de una fusión entre Caixa Galicia y Caixanova, el presidente del PP, Mariano Rajoy, abogó ayer por la existencia de más de una caja en Galicia. En concreto, se declaró "partidario de que haya competencia en los territorios", en abierta contradicción con las tesis del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien defiende la unión de las dos entidades financieras gallegas como única fórmula para garantizar su solvencia y galleguidad.

El líder de los populares hizo esta aseveración en una entrevista en la Cadena Ser, en la que apostó por caja...

A la pregunta de si es partidario de una fusión entre Caixa Galicia y Caixanova, el presidente del PP, Mariano Rajoy, abogó ayer por la existencia de más de una caja en Galicia. En concreto, se declaró "partidario de que haya competencia en los territorios", en abierta contradicción con las tesis del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, quien defiende la unión de las dos entidades financieras gallegas como única fórmula para garantizar su solvencia y galleguidad.

El líder de los populares hizo esta aseveración en una entrevista en la Cadena Ser, en la que apostó por cajas de ahorros "solventes, que generen confianza y den créditos". Añadió que las cajas han desempeñado una función "muy importante" y resultan "muy útiles", porque "muchos proyectos que son territoriales, probablemente si no existieran las cajas no habrían salido a la luz".

En lo que sí respaldó a Feijóo fue en la nueva Lei de Caixas aprobada por el Parlamento gallego, al subrayar que el nuevo marco normativo "prohíbe expresamente que cualquier persona que tenga un cargo electo, sea concejal o diputado provincial, pueda formar parte de los órganos directivos" de las entidades financieras. "No ocurría hasta el momento", agregó Rajoy.

La auditoría encargada para la Xunta sobre la fusión, mientras, "sigue el curso pactado", afirmó ayer la conselleira de Facenda, Marta Fernández Currás. El informe se dará a conocer a lo largo de este mes, aunque serán los agentes sociales, los partidos políticos y las propias cajas de ahorro las primeras en conocer las conclusiones de la due diligence, afirmó la conselleira.Ni la nueva Lei de Caixas ni la inminente renovación de las cúpulas de las entidades impiden a Caixanova seguir pulsando el mercado en busca de alianzas, como alternativa a la fusión con Caixa Galicia. De hecho, y tras el anuncio del presidente de Caja Cantabria, Enrique Ambrosio, que aludió a la constitución de un gran grupo financiero en el que participaría la entidad viguesa, desde Caixanova señalaron ayer que "los contactos se realizan de forma permanente" con muchos actores para la reordenación del sistema de cajas.

"Se ha hablado y se habla con otros", aseguraron fuentes cercanas a la entidad del sur sin concretar nombres de posibles socios. Conversaciones, y no negociaciones es el término que desde Cajamurcia emplean para definir los contactos que se están manteniendo entre las entidades, todas ellas de tamaño medio, para conformar un grupo que, en palabras del presidente de Caja Cantabria, podría llegar a los 100.000 millones de euros en activos. Esa alianza, que pasaría por un Sistema Institucional de Protección (SIP), tiene como protagonistas a las cajas de Cantabria, Murcia y Vigo,

La creación del SIP -la llamada fusión fría , que requiere autorización expresa de la Xunta, según la nueva ley de cajas- permitiría a las tres entidades unificar sus políticas de riesgo y mejorar sus ratings de solvencia, al tiempo que mantendrían cierta independencia. Caja Cantabria afronta la iniciativa con 11.018 millones de euros en activos y unas 175 sucursales, mientras que Cajamurcia tiene activos por 21.796 millones y 420 oficinas, por 30.492 millones en activos de Caixanova y unas 580 oficinas. De entrar en la operación, Cajastur sumaría 15.450 millones y una red de 358 sucursales.

El alcalde de Vigo aplaudió ayer este interés de otras cajas por aliarse con Caixanova, que en su opinión "no necesita" las ayudas estatales. Abel Caballero aseguró que "prácticamente todas las entidades españolas quieren establecer relaciones institucionales" con la caja viguesa, por ser "muy solvente", y defendió la opción de cerrar un SIP, ya que en su opinión garantiza la "independencia" y la "expansión sólida" de cualquier sociedad financiera.

Caballero se remitió a las palabras del secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, que valoró el SIP como una alternativa que "fortalece de forma notable" a las entidades a la vez que les ayuda a mantener su "autonomía". Por último, el alcalde insistió en que Caixanova se encuentra "sin ninguna duda" en situación de continuar siendo viable "por su cuenta", manteniendo su sede en Vigo.

La conselleira de Facenda, mientras, afirmó que no le "consta" ningún contacto entre Caixanova y Caja Cantabria, aunque admitió que "pueden haberse producido". Respecto al recurso anunciado por Caballero contra la Lei de Caixas, Fernández Currás sostuvo que está "en su derecho", aunque ella suscribe la norma "al cien por cien".