300.000 euros y vuelta a faenar
Los pesqueros de Huelva zarpan de Guinea tras estar 23 días retenidos
Una transferencia de 300.00 euros y permiso para zarpar. Los tres pesqueros onubenses que han permanecido 23 días retenidos en Guinea-Bissau, acusados de repostaje ilegal de combustible (bunkering), fueron liberados ayer sobre las 18.30. Los armadores del Alfonso Riera I, Febel III y Sierra de Huelva pagaron en una transferencia conjunta la multa completa de 150.000 dólares (100.000 euros) por buque, tras un intento de la diplomacia española de reducir o anular la sanción de las autoridades africanas.
"Por fin volvemos al trabajo. Hemos obtenido los permisos ...
Una transferencia de 300.00 euros y permiso para zarpar. Los tres pesqueros onubenses que han permanecido 23 días retenidos en Guinea-Bissau, acusados de repostaje ilegal de combustible (bunkering), fueron liberados ayer sobre las 18.30. Los armadores del Alfonso Riera I, Febel III y Sierra de Huelva pagaron en una transferencia conjunta la multa completa de 150.000 dólares (100.000 euros) por buque, tras un intento de la diplomacia española de reducir o anular la sanción de las autoridades africanas.
"Por fin volvemos al trabajo. Hemos obtenido los permisos y, cuando se marchen los militares, zarparemos", celebraba desde aguas guineanas José Vaz, de 55 años y patrón del Alfonso Riera I. Según Vaz, único español de los 16 tripulantes de su embarcación -todos senegaleses y dos guineanos-, el barco estará cuatro o cinco días pescando marisco en la misma zona marítima, al igual que el Febel III, que explotará las reservas guineanas hasta principios de noviembre. Por su parte, el Sierra de Huelva descargará la mercancía en Dakar (Senegal) y después pondrá rumbo norte hacia Mauritania.
Los buques seguirán mariscando en la misma zona durante unos días
Las diferentes interpretaciones legales sobre la competencia jurisdiccional de las aguas alargaron el proceso de negociación. Las leyes internacionales reconocen la potestad del mar a cada país hasta 200 millas de sus costas. Las tres embarcaciones se encontraban a una distancia de entre 85 y 90 millas y tenían todas las licencias en regla. Sin embargo, en Guinea-Bissau las leyes locales prohíben el repostaje aunque las internacionales, según el Ministerio de Exteriores español, no se refieren al bunkering. En este caso cargar combustible en alta mar no sería legal ni ilegal. Tras varias reuniones entre el embajador del país en Guinea y las autoridades africanas, el jueves los dueños de las embarcaciones decidieron abonar la sanción. "Hemos pedido un crédito para una multa tan alta", protestaba José Antonio Alfonso, armador del Alfonso Riera I.