IKEA planta a San Fernando

La locomotora del nuevo parque comercial de San Fernando de Henares ha pasado de largo. IKEA anunció esta semana que renuncia a montar la tienda que tenía proyectada en el complejo Camino Real y se ha llevado en sus vagones 60 millones de euros de inversión y unos 500 puestos de trabajo. Y puede ser más grave. Chelverton, la promotora del complejo donde se iba a instalar la multinacional sueca y cuyas obras han comenzado ya, aseguró tras conocer la noticia que el desarrollo de la actuación está "en riesgo" y anunció que tomará las medidas legales pertinentes contra IKEA por "incu...

La locomotora del nuevo parque comercial de San Fernando de Henares ha pasado de largo. IKEA anunció esta semana que renuncia a montar la tienda que tenía proyectada en el complejo Camino Real y se ha llevado en sus vagones 60 millones de euros de inversión y unos 500 puestos de trabajo. Y puede ser más grave. Chelverton, la promotora del complejo donde se iba a instalar la multinacional sueca y cuyas obras han comenzado ya, aseguró tras conocer la noticia que el desarrollo de la actuación está "en riesgo" y anunció que tomará las medidas legales pertinentes contra IKEA por "incumplir un contrato".

Chelverton reconoce que IKEA iba a ser el motor del parque comercial. Todo el proyecto, que ocupará 42 hectáreas al norte de la autovía A-2, accesos incluidos, estaba pensado para que su tienda fuese el epicentro, el mayor foco de atracción. Pero los suecos han visto cómo las obras se retrasaban por motivos administrativos y ha decidido echar marcha atrás por la imposibilidad de abrirla en el plazo previsto, en aproximadamente un año.

El municipio pierde una inversión de 60 millones y 500 puestos de trabajo

La promotora de la obra y el Ayuntamiento de San Fernando de Henares están indignados. Chelverton, con una inversión prevista de más de cuarenta millones de euros en el parque, ve cómo la base de su idea se desmorona y advierte las dificultades que tendrá su proyecto para salir adelante. El alcalde del municipio, Julio Setién (IU), todavía no renuncia a la presencia de una tienda IKEA en la localidad, y asegura que trabajará "para que den marcha atrás". No en vano, el parque iba a ser un revulsivo para la zona y tenía previsto emplear a más de 4.000 personas.

Pero IKEA asegura que la decisión está tomada y no quiere entrar en polémicas. Sus portavoces no responden si les preocupan las posibles medidas que Chelverton tomará contra ellos. La multinacional de muebles se limita a explicar que no tiene pensado paralizar su expansión en Madrid, donde la compañía construye una tienda, "más grande y mejor ubicada" en Alcorcón, que sustituirá a la que tiene ahora en el municipio. IKEA dispone de tres establecimientos en Madrid y amplía la situada en San Sebastián de los Reyes.

Lo que para la empresa sueca parece ser un contratiempo y cambio de estrategia empresarial, para el Ayuntamiento de San Fernando de Henares resulta una tragedia. Su alcalde busca culpables. Cree que el Ministerio de Fomento, encargado de autorizar una salida de la autovía A-2 al futuro parque comercial, ha tenido su parte de responsabilidad. "Pedimos el permiso hace meses y sólo nos ha llegado una autorización por fax hace unas semanas", argumenta Setién, quien llegó a encerrarse en el ministerio reclamando los accesos. En Fomento, un portavoz aduce que el asunto requería unos plazos y unos trámites que ya están superados.

A pesar de todo, en principio, el proyecto y su desvío en la A-2 siguen adelante. Pero la promotora y el Ayuntamiento de la localidad del Henares saben que será muy difícil suplir a la tienda de muebles y ambos esperan que, por las buenas o por las malas, IKEA retome la idea de ser el corazón del parque comercial de San Fernando.