Aisa renuncia a comprar el hotel Hesperia Sarrià por las deudas

La inmobiliaria catalana Aisa sigue tratando de soltar lastre para hacer frente al pago de sus deudas. La compañía presidida por Genís Marfà planeó adquirir el hotel Hesperia Sarrià, según fuentes del mercado, para construir pisos de lujo con asistencia médica. En la memoria correspondiente a 2007 que presentó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Aisa declaró la compra del inmueble, ubicado en la calle de Els Vergós, a Nozar (que tiene el 5,97% de las acciones de Aisa) por 40 millones de euros.

Sin embargo, ayer la compañía confirmó que finalmente optó por desistir de c...

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La inmobiliaria catalana Aisa sigue tratando de soltar lastre para hacer frente al pago de sus deudas. La compañía presidida por Genís Marfà planeó adquirir el hotel Hesperia Sarrià, según fuentes del mercado, para construir pisos de lujo con asistencia médica. En la memoria correspondiente a 2007 que presentó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Aisa declaró la compra del inmueble, ubicado en la calle de Els Vergós, a Nozar (que tiene el 5,97% de las acciones de Aisa) por 40 millones de euros.

Sin embargo, ayer la compañía confirmó que finalmente optó por desistir de comprar y reducir deuda de su balance. De acuerdo con el auditor de su memoria, BDO Audiberia, debería derivarse una pérdida de 6,78 millones de euros por la renuncia. Sin embargo, ésta ha sido finalmente de 8,5 millones, puesto que el edificio "ya se había deteriorado" en las evaluaciones de mercado que había realizado la inmobiliaria.

La cotización de la empresa catalana sigue suspendida desde el pasado miércoles, cuando el auditor decidió que no podía emitir una opinión sobre sus cuentas a causa de la falta de información y varias "incertidumbres". Entre ellas, el auditor señalaba la renegociación de los plazos de la deuda, la decisión del juez de si acepta la solicitud de concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) que presentó la aseguradora Asefa y la posibilidad de varios acreedores de declarar vencida la deuda anticipadamente.

Aisa declaró ayer a la CNMV que acumula una deuda de 444 millones de euros, inferior a la que tenía en diciembre tras desinvertir por 53 millones de euros y no haber efectuado ninguna inversión. Entre los edificios que tuvo que vender, está el número 30 de paseo de Gràcia. El grupo Nergosa adquirió los locales comerciales y Agrupació Mútua el resto del inmueble.

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