La demora en Ourense lleva a los pacientes a la privada
La demora en el servicio de mamografía del complejo hospitalario orensano (CHOU) aboca a algunas pacientes a las clínicas privadas. Candela Rodríguez sostiene que pagó 130 euros por una mamografía en uno de los hospitales concertados de la ciudad al que acudió, "más enferma de los nervios que de otra cosa", cuando le dijeron en el centro de especialidades de Ourense que "no había hueco hasta 2009". Esto fue en noviembre de 2007 y ella tenía "un pequeño punto en un pecho que resultó no ser nada malo". "Pero me vi morir", dice; "así que acabé pagando".
El Sergas reconoce la demora en las ...
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La demora en el servicio de mamografía del complejo hospitalario orensano (CHOU) aboca a algunas pacientes a las clínicas privadas. Candela Rodríguez sostiene que pagó 130 euros por una mamografía en uno de los hospitales concertados de la ciudad al que acudió, "más enferma de los nervios que de otra cosa", cuando le dijeron en el centro de especialidades de Ourense que "no había hueco hasta 2009". Esto fue en noviembre de 2007 y ella tenía "un pequeño punto en un pecho que resultó no ser nada malo". "Pero me vi morir", dice; "así que acabé pagando".
El Sergas reconoce la demora en las mamografías, pero la atribuye a una disfunción técnica "que ya se está resolviendo". "Las realmente urgentes se hacen todas", dicen desde el Sergas. En el caso de Cardiología, el Sergas achaca también la lista de espera a problemas técnicos generados desde Atención Primaria y señalan que decidieron dejar de dar citación por escrito y avisar por teléfono.
Pero fuentes sanitarias dan datos que evidencian los retrasos en la atención. Como el de J.A.R., que tiene pendiente un by-pass desde hace dos meses "y no tiene cita", o el de G.B., pendiente desde el 5 de diciembre de 2006 de la implantación de un marcapasos de triple resincronización. La operación deberá ser realizada en Santiago, pero derivada desde el CHOU.
Nombres repetidos
Respecto a Rosa María A., la paciente orensana operada de cáncer de mama y que no consiguió cita para la revisión (un caso que fue denunciado por este periódico), el secretario general del Sergas reconoció que la llamaron ayer, en cuanto se enteraron, "no porque lo dijera nadie, sino porque es de justicia". Sin embargo, la afectada que citaba EL PAÍS confirmó a este diario que no ha sido telefoneada ni se le ha adelantado la mamografía. Por error, fue otra paciente, en similares circunstancias y con el mismo nombre, la que se benefició de la revisión.
Ayer, tanto la consellería como el PP se apuntaban el tanto sin saber de la confusión que se había producido. En rueda de prensa, Feijóo se refirió al caso de "la mamografía de Ourense" y sugirió que a la mujer le habían adelantado la cita porque él la había citado en el Parlamento gallego el día anterior. Sin embargo, la realidad es que el popular no habló en la Cámara de Rosa María A. ni de las mamografías en ningún momento de su intervención.