Corcheas por la tolerancia
Israel se ha convertido en la cinematografía revelación de la temporada. Acostumbrados únicamente a los esporádicos estrenos de Amos Gitai, su cineasta de referencia, y al doble éxito de Eytan Fox (Caminar sobre las aguas, Yossi & Jagger), las producciones israelíes no son habituales en las salas españolas. Sin embargo, en apenas unos meses se han exhibido la dolorosa Tehilim, de Raphaël Nadjari, y la arrebatada Mal gesto, de Itshak Grad. Ahora nos llega La banda nos visita, ópera prima de Eran Kolirin, que confirma a un grupo de cineastas capaz de analizar l...
Israel se ha convertido en la cinematografía revelación de la temporada. Acostumbrados únicamente a los esporádicos estrenos de Amos Gitai, su cineasta de referencia, y al doble éxito de Eytan Fox (Caminar sobre las aguas, Yossi & Jagger), las producciones israelíes no son habituales en las salas españolas. Sin embargo, en apenas unos meses se han exhibido la dolorosa Tehilim, de Raphaël Nadjari, y la arrebatada Mal gesto, de Itshak Grad. Ahora nos llega La banda nos visita, ópera prima de Eran Kolirin, que confirma a un grupo de cineastas capaz de analizar la realidad de su país desde órbitas tan distintas como el drama religioso, el thriller psicológico y la comedia política.
LA BANDA NOS VISITA
Dirección: Eran Kolirin.
Intérpretes: Sasson Gabai, Ronit Elkabetz, Saleh Bakri.
Género: comedia dramática. Israel, Francia, 2007.
Duración: 87 minutos.
La banda nos visita es una comedia a la que no se le ven los chistes; un drama, sin que sus personajes saquen a pasear sus miserias; una historia de amor en la que los protagonistas apenas se rozan; una película política en la que el discurso nunca se verbaliza; un filme social en el que sus responsables no se alinean desde un inicio con el estrato de la comunidad. Un relato de (aparente) incomunicación protagonizado por egipcios e israelíes que sólo se entienden hablando en inglés. A través de planos fijos donde el encuadre es básico para que sus criaturas ofrezcan una determinada gestualidad, Kolirin compone una serie de cuadros cómico-dramáticos de apariencia ingenua y fondo perturbador. Una puesta en escena, un humor y un retrato de caracteres emparentado con dos autores de procedencia bien distinta pero de estilo particularmente refinado: el finlandés Aki Kaurismäki y el estadounidense Jim Jarmusch. Ganadora de dos premios del Cine Europeo y de una decena de galardones en diversos festivales, La banda nos visita demuestra que el humor puede ser a un tiempo gélido y cálido, y que la sencillez en la exposición no tiene por qué ir unida a la falta de pretensiones.