Cartas al director

Enérgica protesta

He decidido personarme en Bruselas para protestar enérgicamente por la autorización que se piensa otorgar al uso de teléfonos móviles en los aviones. He pensado proceder a una quema de libros al estilo Farenheit 451, porque de eso se trata: los móviles empezaron por imposibilitar cualquier atisbo de lectura en los trenes (uno de los placeres más sutiles que conocía, paisaje-libro, libro-paisaje) y ahora se pretende que acaben con la lectura en los aviones (otro placer inenarrable, además de eficaz ansiolítico para los temores inherentes a la levitación)....

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He decidido personarme en Bruselas para protestar enérgicamente por la autorización que se piensa otorgar al uso de teléfonos móviles en los aviones. He pensado proceder a una quema de libros al estilo Farenheit 451, porque de eso se trata: los móviles empezaron por imposibilitar cualquier atisbo de lectura en los trenes (uno de los placeres más sutiles que conocía, paisaje-libro, libro-paisaje) y ahora se pretende que acaben con la lectura en los aviones (otro placer inenarrable, además de eficaz ansiolítico para los temores inherentes a la levitación).

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