Financiar la jubilación

Aunque la financiación de la jubilación es una preocupación constante, tanto para la Administración como para los trabajadores, la publicación de análisis como el de la Fundación de Estudios Financieros aporta una reflexión añadida que ayuda a contrastar planteamientos. Este estudio, Instrumentos financieros para la jubilación, va más allá del mero análisis y formula recomendaciones con distintos destinatarios, desde la Administración a las entidades financieras y aseguradoras, así como a empresas y trabajadores.

Algunas de estas recomendaciones, por sencillas, no dejan de ser de...

Aunque la financiación de la jubilación es una preocupación constante, tanto para la Administración como para los trabajadores, la publicación de análisis como el de la Fundación de Estudios Financieros aporta una reflexión añadida que ayuda a contrastar planteamientos. Este estudio, Instrumentos financieros para la jubilación, va más allá del mero análisis y formula recomendaciones con distintos destinatarios, desde la Administración a las entidades financieras y aseguradoras, así como a empresas y trabajadores.

Algunas de estas recomendaciones, por sencillas, no dejan de ser destacables. Por ejemplo, la de reforzar la cultura financiera de los españoles. En ocasiones, es difícil convencerse de la necesidad de ahorrar para la jubilación cuando no se entienden los mecanismos que determinan la pensión pública futura -algunos argumentarán que el mecanismo es complejo y podrá cambiar-, aunque es más fácil visualizar la necesidad cuando se conoce que las pensiones públicas, en media, suponen una reducción de ingresos en torno a un 20% respecto a la etapa laboral y que esta reducción puede ser muy superior en algunos casos -rentas altas, autónomos...-. Por tanto, un mayor conocimiento de los productos financieros por parte de los clientes y de quién los comercializa ayudará a entender cómo cubrir esa diferencia.

"Es difícil decidirse a ahorrar para la jubilación cuando no se entienden los mecanismos que determinan la pensión futura"

Lógicamente, los incentivos fiscales caen dentro del abanico de recomendaciones, pero a la Administración también le afectan las relativas a la emisión de deuda a plazos adecuados a este ahorro -pueden alcanzar 30 o 50 años- o que esté vinculada a precios, lo que permitiría mantener la capacidad adquisitiva del ahorro y evitar que soporte el "coste de la inflación".

A la Administración se le recomienda que mejore la información sobre el envejecimiento y sobre el mercado de vivienda. Ambas informaciones podrían ayudar a homogeneizar y clarificar los productos vitalicios y los que pudiesen desarrollarse de movilización del ahorro inmobiliario (hipoteca inversa).

(*) Profesores de la Escuela de Finanzas Aplicadas (AFI).