Simpatía por el diablo
En un presente dominado por tanto joven cineasta dispuesto a hablar en términos de industria, mercado y producto, es inevitable sentir -por lo menos desde la posición de la crítica- cierta simpatía por quien se expresa en las afueras del discurso consensuado. Francotirador, libérrimo e indomesticable, Pablo Llorca lleva años cuestionando lo que la mayoría da por axiomático. A este crítico le gustaría que la simpatía se convirtiera en una forma de amor-pasión, pero no es el caso.
Comedia fantástica, laberinto de historias y auto-reflexión sobre el relato, Uno de los dos... toma co...
En un presente dominado por tanto joven cineasta dispuesto a hablar en términos de industria, mercado y producto, es inevitable sentir -por lo menos desde la posición de la crítica- cierta simpatía por quien se expresa en las afueras del discurso consensuado. Francotirador, libérrimo e indomesticable, Pablo Llorca lleva años cuestionando lo que la mayoría da por axiomático. A este crítico le gustaría que la simpatía se convirtiera en una forma de amor-pasión, pero no es el caso.
Comedia fantástica, laberinto de historias y auto-reflexión sobre el relato, Uno de los dos... toma como pretexto la imposible y casi nonata historia de amor entre el diablo y una reportera que ha decidido comprometerse únicamente con su vida privada. En la mirada cargada de historia(s) de Mónica López y en la fatigada sorna de Luis Miguel Cintra hay una película posible que la narrativa fracturada, el humor desconcertante y la apuesta por el feísmo de Llorca camuflan debajo de una estrategia general que se le escapa a este crítico. Quizás en este caso -como en tantos otros- el problema sea del crítico.
UNO DE LOS DOS NO PUEDE ESTAR EQUIVOCADO
Dirección: Pablo Llorca.
Intérpretes: Luis Miguel Cintra, Mónica López, Alberto Jiménez.
Género: cine de autor. España, 2007. Duración: 80 minutos.