La policía detiene a dos estudiantes por insultos y amenazas a María San Gil

La policía detuvo ayer a dos estudiantes, acusados de insultos y amenazas a la presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, durante los incidentes ocurridos el pasado martes en la Facultad de Económicas de la Universidad de Santiago. Además de los arrestados, el Juzgado de Instrucción número 1 de Santiago ha abierto un procedimiento penal contra otros dos de los militantes de la organización estudiantil independentista Agir que intentaron reventar una conferencia de la dirigente del PP y se enfrentaron a sus escoltas.

Los detenidos, que declararán hoy ante el juez, son Iago Barros M...

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La policía detuvo ayer a dos estudiantes, acusados de insultos y amenazas a la presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, durante los incidentes ocurridos el pasado martes en la Facultad de Económicas de la Universidad de Santiago. Además de los arrestados, el Juzgado de Instrucción número 1 de Santiago ha abierto un procedimiento penal contra otros dos de los militantes de la organización estudiantil independentista Agir que intentaron reventar una conferencia de la dirigente del PP y se enfrentaron a sus escoltas.

Los detenidos, que declararán hoy ante el juez, son Iago Barros Miñones, estudiante de Derecho, y Sergio Piñeiro, de Económicas. La organización Agir, que anoche celebró concentraciones de protesta en varias ciudades gallegas, reconoció que ambos son militantes de ese minúsculo grupo juvenil de ideología independentista radical.

Las detenciones se practicaron por orden del juzgado a la vista del informe elaborado por el Cuerpo Nacional de Policía, que tenía destinados ocho agentes de paisano en la Facultad de Económicas ante la previsión de que se produjesen altercados. La vigilancia policial permitió que San Gil pronunciase la conferencia, pero a la entrada y salida del acto fue increpada y amenazada reiteradamente. Uno de sus escoltas sufró heridas leves durante los forcejeos con un grupo de unos 25 estudiantes que trataban de aproximarse a la dirigente del PP vasco.

El fiscal encargado del caso, Mario Piñeiro, reconoció, en declaraciones a Europa Press, que existe una "dificultad valorativa importante" sobre la calificación penal de los hechos. Adelantó, en todo caso, que se produjeron amenazas de muerte y enfrentamientos con la policía y algún profesor que podrían ser constitutivos de un delito de atentado. El ministerio público ha solicitado las grabaciones de los incidentes captadas por las cámaras de televisión a fin de precisar mejor la calificación penal e identificar a todos los que participaron en los hechos. La Facultad de Económicas ya ha informado a la policía de la identidad de siete de los jóvenes que intervinieron en el incidente.

El fiscal explicó que en el grupo que organizó la protesta "algunos participaron con una actitud más violenta y otros fueron más pasivos". "No se puede generalizar ni hacer una imputación genérica porque las conductas se difuminan en el grupo", afirmó Piñeiro, quien prometió una instrucción "lo más ágil posible" dada la "relevania social" que han alcanzado los hechos.

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